Pescados y mariscos protagonizan la mesa de las comidas en Semana Santa por razones religiosas y de tradición.
Sin embargo, en la Semana Mayor de este año, la cual comienza el próximo domingo, para muchos venezolanos resulta cuesta arriba comprar un kilo de los productos del mar, pues ello implica gastar casi o más de un salario mínimo o pensión mensual de 130 bolívares equivalentes a unos 5 dólares.
Comerciantes de pescaderías y puestos del rubro en mercados de Caracas, que solicitaron guardar sus nombres en reserva, se quejaron porque las ventas están flojas y la expectativa es que los precios sigan subiendo durante la Semana Santa.
«El kilo de carite, bonita y otros pescados salados cuesta 6 dólares, pero la semana que viene aumentará más», dijo un pescadero en el mercado de Guaicaipuro.
Agregó que «para los clientes el pescado fresco tampoco es barato y, por eso, la gente se va por las especies más económicas como coro coro, sardina o cataco a entre 3 y 3,50 dólares el kilo».
María Rodríguez, ama de casa, exclamó alarmada: «A dónde vamos a parar con esos precios. Ya ni cumplir con la Semana Santa puede uno».
En la entrada de una pescadería en Candelaria, vecinos veían con sorpresa la lista de precios.
«Todo está más caro que la semana pasada», contó José Ruiz, quien tiene la intención de preparar una paella de mariscos por los días santos.
En efecto, los calamares, camarones y almejas cuestan 14, 19 y 12 dólares el kilo, respectivamente.
«Siempre llevo atún porque es rendidor, sabroso, sin espinas y más barato, pero ahora es incomprable», indicó Marta González.
Y es que el precio del kilo de atún rojo y el blanco está en 12 y 11 dólares, respectivamente.
En cuanto a los pescados salados, consumidores consultados recordaron que se utilizan mucho en Semana Santa para preparar platos típicos como pisillos, pastel de chucho y cuajado.
Frente a los altos precios, consumidores de zonas populares caraqueñas señalaron que optarían por otras alternativas.
En los mercados de Quinta Crespo y Guaicaipuro, los pescaderos indicaron que los clientes compran mucho sardinas (entera y fileteada), además de las cabezas de pescado para hacer «un sancocho» y cuyos precios están en 1 y 2 dólares el kilo de acuerdo con el tamaño.
Los comerciantes destacaron que, aunque en menor número, siempre hay clientes que compran las especies más finas como carite, filete (pargo o mero) y salmón en ruedas a 6, 12 y 24 dólares el kilo, respectivamente.
Otros consumidores revelaron su intención de adquirir sardinas y atún enlatados -entre 1 y 3 dólares la lata- pues se «pueden aumentar y rendir» añadiendo vegetales para una salsa de pasta o un arroz guisado.
«Por la Semana Santa hay que abstenerse de comer carne, pero por sus altos precios también la abstinencia aplica para el pescado», ironizó María Rodríguez.
Otras especies de pescado como cazón, roncador, róbalo y lebranche se consiguen en los comercios a 7, 3, 60, 8 y 4,50 dólares el kilo, respectivamente.