El panorama político para la oposición venezolana sigue siendo confuso y más ahora que 2.253.825 de votantes escogieran, el pasado 22 de octubre, a María Corina Machado como candidata de la Plataforma Unitaria para los comicios presidenciales de 2024, aun conociendo que la presidenta del partido Vente Venezuela cargaba sobre sus hombros una inhabilitación para optar a cualquier cargo de elección popular por un período de 15 años.
Confiados en que el poder del voto y las negociaciones a través de la mesa de diálogo auspiciada por el Reino de Noruega rendiría los frutos necesarios para asegurar la participación de Machado las presidenciales, tanto la extinta Comisión Nacional de Primaria, como la Plataforma Unitaria Democrática, donde confluyen la mayoría de los partidos de oposición, brindaron su apoyo irrestricto a la dirigente oplítica.
Sin embargo, el pasado 26 de enero el Tribunal Supremo de Justicia ratificó la inhabilitación política impuesta por la Contraloría General de la República contra María Corina Machado. A raíz de ello, el 11 de marzo, el Consejo Nacional Electoral, a través de su página web aclaró que; «Este elector (a) presenta una prohibición para ejercer cargos o función pública, de acuerdo a lo establecido en la normativa constitucional y legal vigente», en alusión a la candidata opositora.
Las medidas tomadas por el TSJ y el CNE, no obstante, no han amilanado el ánimo de Machado de ejercer su aspiración en la carrera por la silla presidencial, postura que ha sido criticada por quienes piden a sus líderes soluciones reales. Desde entonces se han producido una serie de reuniones y diversos encuentros entre las distintas organizaciones políticas de la oposición y los representantes de la candidata.
¿Hasta el final?
El eslogan de campaña de María Corina Machado es -y desde que inició su camino por la Primaria fue- “hasta el final”, lo que ha sido cuestionado por algunos de sus colegas políticos, según contó una fuente de los partidos políticos que hacen vida en la Plataforma Unitaria y que pidió mantener su nombre en reserva.
“Los puentes de comunicación con la candidata estaban dinamitados, eso no estaba fluyendo. De hecho, lo puedes recoger en las declaraciones de Henrique (Capriles) y de Manuel (Rosales). Por presión de la Plataforma, de (Omar) Barbosa y de otros actores, ha empezado a fluir la comunicación”, detalló.
Dijo que ante la insistencia de Machado de asumir el rol de candidata que se le encargó al momento de ser escogida en octubre, “no hay una estrategia clara, lo que parece haber es una apertura, hay un golpe de timón por parte de la candidata de oír propuestas. Lo demás es ficción. Yo tengo entendido que van a haber reuniones de alto nivel donde se va a conversar cuáles son los escenarios”.
La fuente advirtió que lo que se cree es que el ánimo de la candidata sea “ir a un proceso y desconocer el proceso». «Creo que el resto de los partidos políticos no están de acuerdo con eso. También hay una comunicación que está rodando por ahí y es sobre el tema de que si no soy yo, no es nadie”.
Resaltó que no ve intenciones de llamar a la abstención, como lo hiciera la oposición venezolana en oportunidades anteriores, pero insistió en que María Corina Machado pudiera llamar al desconocimiento del proceso.
“Creo que la comunidad internacional va a trabajar en pro de que haya un entendimiento y que María Corina elija la mejor solución para todos. No creo que llame a la abstención, pero puede llamar al desconocimiento del proceso que, en principio, no es lo mismo, pero es igual”, dijo.
“Las estructuras de apoyo y voluntarios de la candidata han sido mezquinos con los partidos políticos que la respaldan, incluso con los que la apoyaban desde antes, lo que ha generado conflictos y falta de claridad en el panorama político del país. Aunque ha habido cambios, la situación aún no está resuelta”, concluyó.