El nuevo thriller español de Netflix, Bajo cero (2021), es una película de acción que trata de ser algo más, que intenta darle un tono más humano a un relato que posee todos los elementos para ser un hit comercial sin mayores pretenciones.
Aunque la película funciona muy bien bajo el esquema convencional de largometraje hollywoodense donde todo pasa tan rápido que a penas si te das cuenta cuando termina, se toma el trabajo de ser diferente antes del final. Sus tres últimas escenas hacen la diferencia.
Las mejores películas de acción, y pienso en Heat (1995) con Robert De Niro y Al Pacino, Sin escape (1993) con Jean Claude Van Dame, Día de entrenamiento (2001) de Antoine Fuqua, entre otras, además de ofrecer entretenimiento, también se esfuerzan en brindar pinceladas de algunas ideas que quedan en el aire luego de que finalizan. Bajo cero no es la excepción.
En todas partes del mundo la justicia tiene mala prensa, ya que muchas veces de justa no tiene nada. En esta película de Lluís Quílez, protagonizada por Javier Gutiérrez, una vez más el cine español vuelve a este tema, pero con un disfraz que hace esta reflexión mucho más digerible.
Ser una persona correcta dentro de un sistema incorrecto, muchas veces además de ser peligroso, puede llegar a ser inmoral. Al querer seguir las reglas en un ámbito donde casi todos las ignoran, se pueden cometer injusticias. Seguir las normas o no, esa es una decisión que el personaje principal tendrá que tomar.
En Bajo cero los personajes tienen un perfil definido desde el comienzo, salvo dos, que se mostrarán en su magnitud hasta el final. Precisamente estos dos serán los encargados de darle un giro a la trama y poner al protagonista en una disyuntiva moral que será el mejor argumento de la película.
No obstante, antes de conocer la esencia del relato y la importancia que puede tener la decisión del protagonista veremos lo típico de este tipo de largometraje: balas, persecución, enfrentamientos, muertes, tensión y la defensa que cada uno deberá hacer para conservar la propia vida.
Este thriller de acción no es original ni innovador, pero reúne los elementos de otras películas usándolos del modo correcto. No desperdicia ninguna escena aunque puede llegar a ser tediosa en algunos momentos, sobre todo el tramo final, antes de que el giro sorpresivo de la trama te haga disfrutar verdaderamente de la historia que se oculta en la película.
El buen cine no busca dar un mensaje ni aleccionar, pero si puede que, sin quererlo, logre hacerte ver algunas ideas o aspectos de la vida que quizás no habías notado del todo. Esto sucede con esta cinta de acción y suspenso que da para mucho más.
@luisauguetol