Cómo un “huequito” se convirtió en una pizzería con delivery

Pizza Norty es un emprendimiento que surgió en el llamado “huequito”, una antigua panadería ubicada en Los Chaguaramos, Caracas. Así lo relata Palestina Martínez, quien está detrás del negocio. “Desde hace tres años mi esposo y yo iniciamos este proyecto, que antes era una panadería, y quisimos convertirlo en un café, pero con la sensación de que no fuese tradicional quisimos agregarle algo más, algo que lo hiciera peculiar”.

“Comenzamos a convertir la panadería en un lugar más novedoso y moderno, que mantuviera la calidez que tenemos los venezolanos en cuanto al trato, atención y calidad de productos”, dice.

Los clientes lo llamaban “el huequito” porque comenzaron en un lugar muy pequeño, eran seis mesas, luego fueron colocando más en la terraza, convirtiéndolo en una “espacio muy cálido”, como ella misma manifiesta, e incorporaron una nevera de repostería y pastelería. “Uno de los productos estrella de nosotros siempre fueron los golfeados, y ahorita hemos incorporado varios tipos de dulces”, agrega.

Afectados por la pandemia

Martínez asegura que la pandemia los afectó: “Las ventas se nos fueron completamente abajo, pero reaccionamos de manera rápida e incluimos servicio de delivery: Sin embargo, en el caso muy particular de nosotros, creo que las personas disfrutan mucho el venir al lugar, porque te ofrece una terraza fresca con mesas. Es un espacio muy cálido y lo que me preguntaban las personas era que cuándo podían venir”, indica.

Para Pizza Norty, los primeros meses de la pandemia por la COVID-19 fueron de “prácticamente sobrevivir”. “Se acumularon las deudas porque las ventas se vinieron abajo, pero surgieron oportunidades nuevas con la app de delivery. Esto fue una ventana para darnos a conocer en otras localidades y zonas de Caracas, actualmente nos encontramos en PedidosYa y Yummy”, señala.

La promoción favorita

“La relación precio valor es bastante alta. Una de las promociones que inició desde la cuarentena y que le encanta a las personas es la que incluye una pizza familiar o grande, un refresco de 1,5 litros, una ración de tequeños y dos postres a elegir (que pueden ser golfeados, selva negra, trufa, opera, pan de coco o de arequipe, donas, bombas o pasta seca), por el costo de 15 dólares”, añade Martínez.

Los productos de este emprendimiento son elaborados por un panadero, que se encarga de preparar pan francés, de orégano, parmesano, de coco, piñitas y actualmente pan de hamburguesa y de perro caliente. Asimismo, los acompaña un pastelero y un pizzero.

“Nuestro equipo humano tiene bastante tiempo con nosotros, y ha sido una relación de solidaridad, de ganar-ganar, ellos vieron cómo se fue la venta abajo cuando comenzó la pandemia y al principio no vendíamos casi nada. Producíamos solo dos golfeados para no perder tampoco”, comentó.

Calidad y atención

Considera que los clientes valoran la calidad y la atención de Pizza Norty. “Es una mezcla entre la calidad y la atención, por lo que la gente nos prefiere. Los comentarios de las personas son gratificantes para nosotros, nos ayudan a saber en qué podemos mejorar y en qué estamos fallando”, argumentó.

“Lo más satisfactorio para nosotros es ver todo el esfuerzo materializado, estamos enamorados de nuestro proyecto y eso nos facilita manejar este negocio”, apuntó.

Por otra parte, dijo que lo más difícil ha sido el aprendizaje constante desde el primer día, porque anteriormente venían de manejar una ferretería.

“Constantemente tratamos de innovar en nuestros productos y nuestra imagen, manteniendo la exigencia, pero el refrescamiento siempre le agrada a la gente. Recientemente incorporamos paletas de helados y, próximamente, nuestros proyectos son remodelar la barra, porque ya se quedó corta con todos los productos que hemos incorporado, e impulsaremos la venta de pan de hamburguesas y perro caliente”, finaliza.