El año 2022 comenzó muy movido para la realeza británica. No sirvió de mucho que la Reina Isabel II obligara a su hijo Andrés a dejar los actos oficiales y él anunciara que haría las mínimas apariciones públicas para que la polémica en torno a él cesara.
El segundo hijo de la monarca es nuevamente el centro de atención de la prensa toda vez que este martes 4 de enero sus abogados dieron a conocer una nueva estrategia para su defensa. Luego de que se divulgara un acuerdo firmado en 2009 entre Virginia Giuffre y Brian Epstein -el magnate que suicidó en una prisión de Nueva York mientras esperaba juicio por tráfico sexual de menores- todo tomó un rumbo de 180 grados.
Según el acuerdo, Giuffre habría recibido 500 mil dólares por no hablar de los hechos que, supuestamente, involucran a Andrés. La relación entre el príncipe y Epstein ha tratado de ser probada por la Fiscalía de Nueva York con fotografías; así como la presunta participación del británico en la red que manejaba el empresario.
Lo cierto es que en agosto de 2020, Giuffre demandó al príncipe por delitos sexuales, argumentando que él la agredió sexualmente en 2001, siendo ella menor de edad (17 años) en tres lugares: Londres, Nueva York y las Islas Vírgenes de Estados Unidos. El príncipe y sus apoderados han negado categóricamente no solo este, sino cualquier otro cuestionamiento que puedan hacerle sobre este aspecto. La ahora adulta de 38 años le pide, entre otras cosas, una compensación monetaria cuyo monto no ha trascendido.
De acuerdo con la agencia AFP que ha seguido de cerca el caso, en la audiencia virtual que se hizo el martes, “Giuffre renunció a sus derechos para presentar una demanda contra ellos cuando firmó el acuerdo de 2009 y aceptó el dinero de Epstein», indicó uno de los defensores, Andrew Brettler”.
Sin embargo, la misma agencia consultó al profesor de derecho de la Universidad de Pace, Bennett Gershman, quien dijo que espera que el juez del caso no le dé curso a la petición de la defensa del príncipe. «¿Están diciendo que todo el mundo debería quedar libre por ese acuerdo? Es difícil de vender», les dijo.
Aunque desde que detuvieron a Epstein y a su pareja, Ghislaine Maxwell, quien a finales de año fue encontrada culpable de los cargos por delitos relacionados con el tráfico sexual de menores, el nombre del príncipe apareció ligado al caso.
No obstante, él se ha empeñado de cualquier manera de negarlo, fotografías –incluyendo dos donde aparece con su acusadora, Virginia Giuffre- dan cuenta de su cercanía con la red de corrupción que tenía Epstein. De allí que la Reina lanzara un salvavidas más que para él, para la Corona. Ahora el juez Lewis Kaplan tiene en sus manos el destino del buen nombre del príncipe Andrés. Reportan los medios que al final de la teleconferencia Kaplan dijo que decidirá muy pronto sobre este recurso de la defensa.