La vida está hecha de ciclos y no se detiene; mientras unos cierran, otros nuevos comienzan a abrirse paso y a escribir su propia historia. Un ejemplo claro de esto, lo podemos ver en el beisbol de las Grandes Ligas, con los casos de dos criollos en particular.
Ayer por la noche, Miguel Cabrera era noticia en todo el país, ya que el veterano en su decimonovena temporada en la Gran Capa ligaba trío de imparables contra los Yankees de Nueva York, para colocarse a uno de los legendarios 3000 hits, lo que –entre otras cosas– lo empataría con el mito puertorriqueño Roberto Clemente.
Pero, por esta vez, no vamos a hablar hondo sobre los logros de Miggy, que –cómo no– ciertamente nos mantiene a la expectativa de lo que pueda ocurrir esta tarde en el Comerica Park de Detroit.
A escasos kilómetros de Detroit (271,4 km), poco más de dos horas y media de camino, en el Progressive Field de Cleveland, comenzaba a escribirse un nuevo capítulo para Venezuela en Las Mayores. En el segundo juego de la doble cartelera, entre los Medias Blancas de Chicago y los Guardianes, el novato Gabriel Arias conectaba su primer indiscutible de Grandes Ligas, lo que para muchos es la graduación.
El aragüeño recibió, ayer mismo, el llamado al equipo grande, haciendo su debut en el primer encuentro de la jornada, en la paliza (11-1) que su equipo le propinó a los patiblancos. Alineó como séptimo bate y camarero, y se fue en blanco en cuatro chances, con una empujada y una anotada (se embasó en par de oportunidades, por errores del torpedero Tim Anderson).
En el segundo choque, luego de haber fallado con rolling al campocorto en el inning dos, pescó una recta del abridor Jimmy Lambert, en la cuarta entrada, y soltó una línea floja al jardín derecho para apuntarse su primer hit en el ‘Big Show’.
Inmediatamente sus compañeros comenzaron a pedir la pelota, para que el criollo la guardase como un ‘souvenir’ de la primera piedra en la que cimentará su camino en el beisbol profesional.
Hasta el momento, Arias se ha mostrado agresivo –o ansioso– en el plato, haciendo swing a los primeros pitcheos, con los que se ha ido en par de ocasiones; y de este mismo modo llegó su primer imparable, con un primer pitcheo, en forma de recta adentro, a 93.4 millas por hora, que el joven de 22 años tuvo la habilidad de llevar hacia su banda contraria.
El nativo de La Victoria, estado Aragua, llegó a Cleveland (2020) proveniente de los Padres de San Diego, en el cambio que convirtió a Mike Clevinger en ‘religioso’. Actualmente está rankeado como el tercer mejor prospecto de la organización de Ohio, por delante de su compatriota Brayan Rocchio.
Firmado originalmente por San Diego, en el año 2016, por 1.9 millones de dólares. Fue el bateador joven mejor calificado de 2021 en Triple-A Este, con promedio de .284, 13 jonrones, 29 dobles y .802 de OPS; también sobresalió por su buena defensa.
Casualmente, el scouting report lo cataloga como un bateador demasiado agresivo en el plato, lo que puede jugarle en contra, pues falla con frecuencia con roletazos débiles. El reporte también indica que deberá trabajar en ello, para ser más selectivo a la hora de hacer swing.
Sin embargo, también destacan la velocidad con la que saca el bate y la fuerza que tiene para hacer contacto, con lo que lo catalogan como un potencial bateador de 25-30 cuadrangulares por temporada. Asimismo, recibe buenos comentarios por su velocidad y sus reflejos en defensa; calificado para ser un torpedero de garantías, también puede jugar como intermedista y en la esquina caliente.
Arias debutó en la Liga Venezolana de Beisbol Profesional, durante la temporada 2018-2019, con el uniforme de los Tiburones de La Guaira. Conectó 15 indiscutibles, entre ellos un doble, anotó seis carreras y dejó promedio de .254, en 24 compromisos.
En los entrenamientos primaverales de 2022, ligó de 14-8 (.571), con un doble, tres empujadas y cuatro anotadas. Mientras que el año pasado, conectó la misma cantidad de hits en un turno menos, para dejar un interesante .615 de average, con un doble y cinco fletes.
El venezolano podría regresar, eventualmente, a la sucursal de Triple-A (Columbus Clippers), una vez que los infielders Owen Miller y el taiwanés Yu Chang sean reactivados de la lista de lesionados.