Este miércoles 26 de octubre se cumple un mes de la reapertura de la frontera entre Colombia y Venezuela, luego que se mantuviera cerrada por siete años, tras romperse las relaciones diplomáticas entre ambas naciones, lo que afectó duramente a las empresas, especialmente, del lado venezolano.
Las expectativas con la reapertura de la frontera fue que las importaciones serían unos de los factores determinantes en el crecimiento económico de ambas naciones. Sin embargo, durante el primer mes no se registraron grandes cambios.
Apenas, unos 65 camiones han pasado por el puente internacional Simón Bolívar, como parte del intercambio comercial entre San Antonio del Táchira y Cúcuta.
“Esperamos que esto vaya creciendo. Hay que recuperar la confianza, Colombia no es lo que era hace siete años atrás, igual Venezuela. Nosotros hemos vivido una situación que ha disminuido las capacidades de nuestras empresas y organizaciones”, dijo el director ejecutivo de Fedecámaras Táchira, José Luis Jiménez.
En declaraciones a HispanoPost, Jiménez enfatizó que “parte de la recuperación economía del país va a generarse desde el Táchira. Pero bajo ninguna razón puede volver a ocurrir que esta frontera se cierre nuevamente”.
Hasta los momentos, no hay datos oficiales de cuanto ha sido el monto del flujo comercial entre Colombia y Venezuela, tras abrirse esta frontera. “Pero se estima que podamos lograr en el primer año más de 700 millones de dólares”, dijo.
El bloqueo comercial que hubo entre Colombia y Venezuela fue solamente en entre Táchira y Cúcuta. Por ejemplo, en el caso de la frontera de Paraguachón, por el estado Zulia, el intercambio comercial del año pasado fue alrededor de 300 millones de dólares.
El representante de Fedecámaras Táchira resaltó que “el paso legal es el camino correcto” que deben tomar estos países hermanos, para poder diseñar políticas públicas que permitan la mejoría de toda la región fronteriza.
A su juicio, esto fomentaría un mejor manejo de las mercancías y productos que se están importando entre ambas naciones, así como que la capacidad de producción de las empresas aumente.
En este primer mes, según Jiménez, se ha logrado la importación de materia prima, plásticos y material que tiene que ver con productos metálicos, pero “se espera que las empresas del sector plástico, automotor, tabaco, marroquinero, el sector de cuero y textil puedan tener el impacto que tuvieron en épocas pasadas”.
Según datos de migración Colombia, transitan más de 30 mil personas diariamente entre San Antonio del Táchira y el departamento del Norte de Santander, una frontera que comparte 2.219 kilómetros.
Antes del cierre de esta frontera, existía una importancia capital del lado venezolano: por ejemplo, el sector textil, fabricaban más de cinco millones de blue jeans al mes y más de 30 mil autobuses fueron ensamblados durante 30 años.
Colombia proyecta más 1.200 millones de dólares
Por su parte, Francisco Rodríguez, director de ABC América, detalló que las autoridades colombianas estiman que para el año 2023 puedan mover alrededor de 1.200 millones de dólares en la frontera colombo venezolana, entre manufactura, productos agropecuarios, petroquímicos, medicamentos, artículos de aseo, entre otros.
“Actualmente, no tenemos una estimación, porque apenas esos datos los están empezando a procesar el Banco Central de Colombia y la Dirección de Impuestos y Aduanas Nacionales”, dijo Rodríguez.
El periodista especializado en economía y política explicó que al momento de abrirse la frontera se generó una “gran expectativa”, luego de que permaneciera cerrada durante siete años.
“Pero la verdad es que eso será un proceso muy lento, debido a que hay que recuperar la confianza, establecer claramente los parámetros en que se va a desarrollar entre ambos gobiernos y entre los empresarios que desarrollan el comercio en la frontera. Apenas está calentando motores, se está haciendo un ajuste diplomático primero que todo”, acotó.
Sin embargo, apunta a que el flujo comercial, “sin duda alguna, va mejorar para la temporada de fin de año”.
Rodríguez enfatizó que todavía las autoridades tanto de Colombia como de Venezuela están en proceso de formalización y negociación, que responde a “compromisos de seguridad fronteriza”.
“Esto no es tan sencillo, especialmente debido al contrabando que se mantiene en la frontera Colombia-Venezuela”, dijo.