Estados Unidos sancionó a Vladímir Potanin, el magnate más rico de Rusia y presidente y mayor accionista del gigante minero MMC Norilsk Nickel PJSC, pero no tocó a su empresa, mientras trata de mantener la estabilidad en el mercado de los metales.
La medida contra Potanin es parte de un paquete de sanciones más amplio que el Departamento del Tesoro hizo público el jueves y que afecta a unas 40 personas vinculadas al Gobierno ruso. También se incluyó a Rosbank PJSC, que Potanin adquirió a principios de este año, y a una serie de entidades más pequeñas. Los precios del níquel registraron escasa variación en Londres tras el anuncio, reduciendo las ganancias anteriores.
“Al sancionar a otros importantes bancos rusos, seguimos aumentando el aislamiento de Rusia de los mercados mundiales”, dijo el subsecretario del Tesoro, Brian Nelson, en un comunicado. “Las designaciones de hoy por parte de EE.UU., junto con las medidas adoptadas por nuestros socios internacionales, inhibirán aún más la capacidad del régimen de Putin para financiar su horrible guerra contra Ucrania.”
Más del 40% del patrimonio de Potanin —US$30.400 millones según el índice de multimillonarios de Bloomberg— proviene de su participación en Nornickel, uno de los mayores productores mundiales de níquel, paladio y cobre. Aunque las restricciones no se extendieron a Nornickel, podrían incitar a algunos clientes y bancos a evitar el metal ruso en una forma de autosanción.
La medida de EE.UU. se produce después de que el Reino Unido impusiera sanciones a Potanin a fines de junio. Antes de eso, Potanin se había librado en gran medida de las sanciones occidentales que afectaban a otros miembros de la élite rusa. También ha sido sancionado por Canadá y Australia.
Potanin dirige Nornickel desde que en 2012 se alcanzó un acuerdo de accionistas con United Co. Rusal International PJSC, el segundo mayor inversionista de la empresa. Potanin posee una participación de poco menos del 36% a través de su empresa de inversiones Interros Holding.
El departamento de prensa de Nornickel y la portavoz de Potanin declinaron hacer comentarios.
Las sanciones también afectan a la esposa de Potanin y a sus dos hijos adultos, además de su superyate Nirvana, valorado en cientos de millones de dólares, según un comunicado del Departamento de Estado estadounidense.
Rusia es uno de los principales productores mundiales de níquel, con cerca del 9% de la producción mundial, y un proveedor clave de otros metales como aluminio, cobre y paladio.
La Bolsa de Metales de Londres decidió el mes pasado no prohibir nuevas entregas de metal ruso, tras iniciar en octubre un debate formal sobre el asunto en respuesta a las autosanciones de algunos consumidores. Aunque EE.UU. y Europa han impuesto amplias sanciones a Rusia en respuesta a la invasión de Ucrania, los metales negociados en la LME se han librado en su mayoría de las restricciones generales.
Fuente: Bloomberg