Es bien sabido que los Yankees de Nueva York han sido celosos y cautelosos con sus dos principales prospectos, ambos infielders cuya posición natural es la del campocorto. El de mejor estatus es Anthony Volpe, nacido en New Jersey; y el otro es Oswald Peraza, de Barquisimeto estado Lara.
Mientras comenzaban los entrenamientos primaverales, los neoyorquinos adquirieron vía cambio –desde los Mellizos de Minnesota– a Isiah Kiner-Falefa, con el objetivo de cubrir las carencias defensivas que tenían en la posición seis; dándole al también venezolano Gleyber Torres, la oportunidad de regresar a la intermedia, luego de no cumplir a cabalidad en las paradas cortas.
A lo largo de la temporada, el hawaiano ha mostrado una defensa a la altura, como el Guante de Oro que es (ganó el premio en 2020, como antesalista), dándole una mayor estabilidad al equipo y una mayor confianza al cuerpo de lanzadores, al saber que tienen una línea central sólida.
Sin embargo, en el aspecto ofensivo el rendimiento de IKF ha quedado un poco a deber, muy por debajo de lo que se esperaba; algo que quizás no ha sido tan notorio, gracias a que hay otras figuras como Aaron Judge, Giancarlo Stanton o el propio Torres, que se han encargado de la producción.
Pero Kiner-Falefa está promediando .271 con el madero, no tiene triples ni cuadrangulares, solo ha sonado 16 dobles y acumula 33 remolques; Además, su porcentaje de embasado es de .315.
Vale destacar que al ex de los Rangers de Texas todavía le queda un año de control contractual, para 2023, cuando podrá optar al arbitraje salarial; será agente libre para la campaña 2024. Su salario de esta temporada es de 4.7 millones de dólares.
Con Oswald Peraza rindiendo a tope en la sucursal de Triple-A (Scranton/Wilkes-Barre RailRiders), es mucho lo que se ha comenzado a especular, e incluso a demandar por parte de la fanaticada Yankee, que el criollo sea promovido al equipo grande; bien sea para compartir tiempo de juego, o para pelear abiertamente por la posición.
Una hipotética subida del barquisimetano, abriría las puertas de Triple-A a Volpe, que también ha estado haciendo una buena labor en Doble-A, con el Somerset Patriots, a pesar de haber tenido un lento comienzo en la categoría.
El venezolano tuvo un julio brillante y se mantienen encendido en lo que lleva de agosto. El mes pasado tuvo promedio de .300 exactos, con cinco cuadrangulares y 15 producidas; mientras que este mes está ligando .303 puntos de promedio, con un bambinazo.
En la temporada, batea para .258, pero se ha volado la barda en 15 oportunidades y suma 42 carreras empujadas, por 44 anotadas. A su vez, el infielder de 22 años se ha estafado 26 almohadillas para la causa de los RailRiders.
Lo cierto es que, el venezolano viene presionando fuerte desde las sucursales, con un excelente desempeño tanto con el guante, como a la ofensiva. Algo que podría hacer que la gerencia considere adelantar su ascenso al ‘Big Show’.
Nueva York ha sido bastante paciente con Peraza, así como con Volpe, y el recelo demostrado cada vez que se les pregunta por ellos en cualquier negociación, deja entrever que tienen planes para ambos jugadores, que probablemente establezcan la llave del segundo cojín entre un mediano y corto plazo.
El criollo es, de los tres principales prospectos de la organización, el que más completo y avanzado luce en su desarrollo como jugador, por lo que el equipo podría darle la oportunidad de irse fogueando al más alto nivel, sobre todo si la mala racha que tienen después de la pausa del Juego de Estrellas sigue extendiéndose.
Por otro lado, los Yankees de Nueva York también cuentan en sus granjas con otro venezolano, el infielder Oswaldo Cabrera, igualmente un especialista del shortstop pero con una defensa un tanto más versátil, pues al igual que su compatriota, puede jugar en la intermedia, con el plus de que también tiene experiencia en la esquina caliente.
Esta temporada, Cabrera ha jugado principalmente (19 juegos) como camarero, haciendo llave con Peraza, aunque también ha visto bastante acción (15 juegos) en el campocorto, además de otras seis apariciones como antesalista. El mirandino también se vería beneficiado si su compatriota es ascendido a Grandes Ligas.