La Fundación Simón Bolívar, fundación privada sin fines de lucro de CITGO Petroleum Corporation, presentó los resultados de un informe –realizado recientemente– sobre la crisis de salud en Venezuela, con el objetivo de ayudar a orientar los programas benéficos de salud humanitaria y proporcionar datos actualizados, objetivos y fiables. El informe fue preparado por investigadores del Centro de Salud Humanitaria de la Escuela de Salud Pública Bloomberg de la Universidad de Johns Hopkins.
Comprender la situación del sector salud en Venezuela es complicado debido a la dificultad para obtener información precisa sobre la salud, los datos de laboratorio, y la capacidad de pruebas médicas en el país. De hecho, no se han publicado datos oficiales desde el año 2017. Este informe, presentado por la Fundación Simón Bolívar, indica que la crisis política y económica de los últimos cinco años ha paralizado gravemente el sistema de salud venezolano y que la situación se ha visto agravada por la pandemia del COVID-19.
Revisando la información y los datos disponibles de 2019 hasta finales de 2021, el informe revela lo siguiente sobre la situación sanitaria actual en Venezuela:
La esperanza de vida en Venezuela ha disminuido, y las tasas de mortalidad infantil y materna han aumentado en contraste con las tendencias regionales.
La cobertura de vacunación en Venezuela está muy por debajo del promedio regional, con un resurgimiento de muchas enfermedades prevenibles por vacunación, en particular el sarampión.
La infraestructura de salud de Venezuela se está desmoronando, con más del 70% de los hospitales públicos sin acceso regular a agua o electricidad, con una distribución inadecuada de medicamentos y suministros esenciales, y con la pérdida de muchos trabajadores de la salud.
Más del 90% de la población vive en la pobreza y el 32% de los niños tienen desnutrición crónica.
Se estima que hay 14,3 millones de personas en Venezuela que necesitan asistencia humanitaria. El plan de respuesta humanitaria 2020 de las Naciones Unidas solicitó 763 millones de dólares en ayuda, pero en agosto de 2020 solo se habían proporcionado 130 millones de dólares en asistencia.
El informe incluye como recomendaciones claves que las inversiones en salud deben priorizar:
Invertir en nuevos grupos de trabajadores de la salud que requieran una formación menos amplia y que puedan prestar servicios esenciales a nivel comunitario y de atención primaria.
Suministros y medicamentos adecuados para la atención primaria y preventiva esencial.
Centrarse en elevar los niveles de cobertura y capacidad de prestación de servicios de salud materno-infantil, nutrición, salud sexual y reproductiva, enfermedades no transmisibles y salud mental.
Abordar las brechas generalizadas en el acceso a la salud e invertir en la atención primaria a nivel comunitario y en ambulatorios.
Este informe fue presentado como parte de una serie de seminarios web, patrocinados por la Fundación Simón Bolívar y organizados por el Centro para la Filantropía en Desastres, llamados “Conversaciones a la hora del almuerzo: una oportunidad de aprendizaje para los financiadores”, organizados con el objetivo de crear conciencia sobre la crisis humanitaria en Venezuela. simonbolivarfoundation.org.
El informe demuestra que podemos ayudar a mitigar la crisis actual en Venezuela a través de la coordinación de esfuerzos colectivos. Próximamente, la Fundación anunciará una convocatoria pública de propuestas de atención integral para la salud materna, neonatal e infantil dentro de su Programa de Subvenciones Medianas/Grandes de Atención Humanitaria.
Visite simonbolivarfoundation.org para obtener más información sobre el proceso de aplicación y sobre los plazos para la consideración y aprobación de propuestas.