“La restauración del Museo Sacro de Caracas es un milagro con mucha fuerza de voluntad”

El Museo Sacro de Caracas es uno de los centros culturales que están alrededor de la plaza Bolívar y contiguo a la Catedral. Fue inaugurado hace 30 años en espacios que fueron el primer cementerio de la ciudad y la celda de sacerdotes, aunque en el último tiempo afrontó un deterioro que se agravo durante el tiempo de pandemia.

En el momento en el que el cardenal Baltazar Porras fue designado para estar al frente del Arzobispado de Caracas, le propuso al padre Gaspare Rino Salerno la presidencia y dirección general del museo, que fue reabierto a principios de diciembre e incorpora en el recorrido al Palacio Arzobispal.

“Cuando el cardenal Porras me propuso esta responsabilidad supe que me iba a encontrar con grandes obstáculos y el primero de ellos es el pesimismo y creer que no somos capaces de cambiar nuestras realidades; y la restauración del Museo Sacro es un ejemplo que con fuerza de voluntad se pueden transformar espacios”, dijo el padre Salerno. “Podríamos decir que el milagro viene porque con muy pocos recursos logramos recuperar estos espacios maravillosos”, añade.

En una de las salas del museo hay varias de las obras con imágenes religiosas del pintor venezolano Juan Pedro López, abuelo materno de Andrés Bello; entre la que destacan los arcángeles o la de bautizo de Cristo.

También está la talla colonial de Nuestra Señora de Los Ángeles, con un traje realizado en 1996 por el diseñador de modas Ángel Sánchez y adornos del orfebre Eduardo Martínez, quienes se inspiraron en el periodo barroco.

Tanto el Museo Sacro como el Palacio Arzobispal de Caracas estarán abiertos de martes a domingo y para su ingreso se solicitará una colaboración de 2 dólares que ayudarán al mantenimiento y restauración de alrededor de 30 obras de arte.