El Consejo de Administración de la Oficina Internacional del Trabajo (OIT) resolvió este martes expulsar a Rusia por consecuencia de la agresión sostenida a Ucrania.
La resolución fue tomada con base a las resoluciones de la Asamblea General de las Naciones Unidas y del Consejo de Derechos Humanos de la ONU, sobre la invasión rusa y la situación de los DDHH en Ucrania a raíz de la guerra. Así también, en virtud de los ideales de la OIT como la promoción de la paz y el bienestar de los trabajadores, siendo estos los más afectados por la invasión rusa.



La resolución declara que la agresión continuada perpetrada contra Ucrania por la Federación de Rusia, “es totalmente incompatible con los fines y objetivos de la Organización y con los principios que rigen la condición de Miembro de la OIT”.
En este sentido, decidieron suspender temporalmente la cooperación o asistencia técnicas de la OIT a la Federación de Rusia, excepto con fines de asistencia humanitaria, hasta que se acuerde un alto el fuego y se aplique una solución pacífica.
En el documento, exhortan a la Federación de Rusia a que cese “de inmediato y sin condiciones” su agresión a Ucrania, “retire sus tropas, ponga fin al sufrimiento que está causando al pueblo de Ucrania, y se abstenga de recurrir a cualquier otra forma ilícita de amenaza o uso de la fuerza contra cualquier otro Estado Miembro y emprenda el camino de una solución pacífica de conformidad con la Carta de las Naciones Unidas y el derecho internacional”.