Jannina Pojan es una barista venezolana que primero a través de la Escuela del Café (Escafe) y sus cuentas en Instagram @lacoffeeteacher y @escafe_ve y más recientemente en la Cafetería Kaldi se ha dado a la tarea de promover y enseñar a tomar un buen café, además de impulsar a los apasionados de esta bebida para que se atrevan a probar nuevas modalidades de tomarse el grano sin perder las tradiciones.
“Al venezolano la resulta difícil cambiar los hábitos sobre cómo toma el café porque siempre va a pedir un negrito, con leche o un marroncito, pero no deja de estar abierto a nuevas experiencias”, dijo Jannina. “No obstante, al café tipo guayoyo, que es tan delicioso, lo están matando los consumidores. El venezolano no le da cabida al guayoyo en las cafeterías, pero nosotros lo estamos recuperando”, añadió.
El auge de cadenas de cafetarías ha llevado a que muchos confundan la preparación del guayoyo con el tipo americano e incluso se llega al extremo de que nuevas generaciones desconocen tanto este método de preparar el café en Venezuela como la propia palabra.
En esa cruzada, Janinna desde que está al frente de la formación e instrucción de los jóvenes que aspiran a ser baristas en Café Kaldi incluyó en la carta al guayayo preparado, en lo que comúnmente se conoce como “guayoyera”, con su manga de tela artesanalmente realizada en madera por su padre.
En ese empeño, combina su labor tras la barra y frente a la máquina de espresso con la de trabajar con los productores de todo el país. Es respetada por los pequeños y medianos caficultores con trayectoria y muchos de los cuales hacen vida gremial en Fedeagro.
Cuando se le pregunta cuál es el mejor café, parafrasea lo que fue por años el slogan de la marca Fama de América, pero mencionando el gentilicio: “Por el aroma yo lo sé, el venezolano es el mejor café porque activa las emociones”. Y cuando se le consulta sobre el mejor grano del país, sin dudarlo asegura que es el sembrado en el estado Mérida.
