Las actividades de Petróleos de Venezuela (Pdvsa) están en su nivel más bajo. Solo 10% de la nómina de la estatal se mantiene en los lugares de trabajo, aseguraron sindicalistas.
Las fuentes alertaron que las áreas operacionales están prácticamente abandonadas y solo se trabaja, mínima capacidad, en las refinerías de Amuay-Cardón y El Palito, ubicadas en los estados Falcón y Carabobo, respectivamente; el Criogénico de Oriente, en Anzoátegui; los campos de gas, en Monagas; y algo en la faja del Orinoco.
«Desde antes de la cuarentena del COVID-19, más de 90% de los trabajadores de la nómina de Pdvsa recibió la instrucción de no acudir a sus puestos porque las actividades habían caído estrepitosamente. Además, la empresa no garantizaba al personal los servicios de transporte, comedor y agua, ni tampoco la provisión de uniformes, herramientas e implementos de seguridad», explicó el dirigente sindical Félix Jiménez.
Destacó que los trabajadores apartados de sus funciones cobran su salario, pero su monto es tan bajo que la gente debe rebuscarse, vendiendo comida o prestando algún servicio.
Precisó que actualmente la nómina de Pdvsa supera los 100.000 empleados, por lo que más de 90.000 personas se encuentran en esta situación irregular.
Iván Frente, directivo de la Federación Única de Trabajadores Petroleros de Venezuela (Futpv), denunció que en las actividades que Pdvsa todavía realiza se trabaja con el mínimo de la plantilla de personas y los turnos diarios fueron reducidos de cuatro a tres, con muy pocas personas.
«En Cardón, que regularmente empleaba 700 operadores de planta y 300 de mantenimiento, ese número se redujo a 150 y 20 personas en jornadas de 10 y 12 horas diarias», indicó el sindicalista.
Agregó que en todas las áreas del país donde hay actividad petrolera trabajan un poco más de 1.500 personas.
Reducción de personal
Ambos sindicalistas coincidieron en que la reducción de la nómina de Pdvsa forma parte de la estrategia detrás de la aprobación de la Ley Antibloqueo, que consiste en llevar el número de empleados de Pdvsa a su mínima expresión.
Jiménez resaltó que están ocurriendo despidos en los cuadros más altos (gerentes y supervisores) del área administrativa de estatal, donde se contempla una reducción mucho más agresiva de personal, y para ello ya hay una lista.
De acuerdo con Freites, esta medida persigue ahorrarles a los socios gastos y conflictos laborales cuando manejen las actividades dentro de un esquema de privatización.
Los dirigentes indicaron que la reestructuración del personal será más evidente después de las elecciones parlamentarias del 6 de diciembre.
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