El Banco Bilbao Vizcaya Argentaria (BBVA) ha recuperado los niveles de beneficios anteriores a la pandemia, al ganar 3.311 millones de euros hasta septiembre, una vez digeridos los gastos de reestructuración en España y con nuevos proyectos como la mayor recompra de acciones de Europa o la expansión digital en Italia, que podría extenderse a otros países a mediano plazo.
El consejero delegado del Grupo, Onur Genç, ha explicado a través de una rueda de prensa que destinarán un máximo de 3.500 millones de euros a la citada recompra del 10% del capital, casi lo mismo que han ganado hasta septiembre, y que lo harán en varios tramos, el primero de ellos inmediatamente después del Investor’s Day, previsto para mediados de noviembre.
Pero esta inversión, que busca dar valor al accionista con menos títulos pero más caros, no agota la hucha de capital excedente que tiene el banco tras la venta de su filial en EEUU, por lo que Genç ha abierto la puerta a explorar otras opciones como seguir mejorando el dividendo o crecer orgánicamente en los principales mercados donde opera.
Y aunque también serviría para financiar una compra, Genç ha insistido como cada trimestre en que esas operaciones tienen que tener sentido y no dependen en absoluto de si se tiene o no se tiene capital, pues siempre se puede acudir al mercado si hace falta.
Al ser consultado por si no se lamentan de no haber seguido adelante con la fusión con Sabadell, que exploraron hace un año cuando el banco catalán cotizaba más barato, respondió que BBVA «siempre mira hacia adelante» y toma todas sus decisiones pensando en «lo mejor para el accionista».
El banquero insistió en el potencial del BBVA y la importancia de mercados como España, México o Turquía, donde la entidad es un inversor a largo plazo y cuenta con la posibilidad de aumentar su participación en Garanti .
En el caso concreto de Europa, ha destacado la captación de 535.000 clientes en lo que va de año y ha avanzado que, si el euríbor deja de ser negativo, los ingresos del BBVA antes de impuestos aumentarían en 300 millones de euros más.
Tras la entrada reciente en Italia con el lanzamiento de un banco exclusivamente digital, Genç cree que hay que esperar a tener «señales claras» de que los clientes están satisfechos con la oferta, aunque ha mostrado su satisfacción por la evolución en estos primeros días.
En su opinión, sólo si la experiencia de Italia se convierte en un éxito, pensarán en la posibilidad de exportar este modelo «a medio plazo» a otros países.
A diferencia de otros competidores, el consejero delegado del BBVA aboga por la prudencia y prefiere esperar a 2022 antes de empezar a liberar provisiones, ya que la entidad está pendiente de cómo pueden evolucionar 5.000 millones de euros de la cartera de cerca de 13.000 millones concedidos en líneas ICO.
Con información de Agencia EFE.