Las conversaciones dentro del Foro de Diálogo Social entre trabajadores, empleadores y el Ejecutivo, con el apoyo de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) no avanzan lo suficiente como consecuencia de las tácticas dilatorias por parte de la administración de Nicolás Maduro, aseguró José Elías Torres, directivo de la Confederación de Trabajadores de Venezuela.
«En todo el país hay una gran presión externa con una constante e intensa movilización de trabajadores en la calle exigiendo salario decente; sin embargo, el gobierno hace caso omiso a las recomendaciones de los otros integrantes de la mesa de diálogo y de la OIT», destacó el representante de la CTV.
El proceso del diálogo social persigue el cumplimiento por parte del gobierno de la agenda fijada dentro del informe de la Comisión de Encuesta de la OIT que estuvo en Venezuela en septiembre de 2019.
La máxima instancia de la organización laboral internacional constató in situ las graves violaciones gubernamentales a los convenios 26, 87 y 98 de la OIT sobre salarios, libertad sindical y contratación colectiva.
Agotando la paciencia
En la mesa de diálogo social -que comenzó en enero de 2023 luego de tres años de preparación- las partes acordaron diseñar una metodología común para la fijación de los salarios.
Al respecto, Torres alertó que el Ejecutivo le ha dado largas al asunto y toma decisiones unilaterales como mantener congelado el salario mínimo en 130 bolívares (3,40 dólares) al mes desde mayo de 2022.
Explicó que hasta ahora el gobierno no ha presentado ante la mesa de diálogo social los elementos para elaborar la metodología como el Presupuesto de la Nación, sus estadísticas oficiales de empleo, costo de la vida y de la canasta básica y la situación de la economía, entre otros parámetros.
Los datos de los sindicatos y empleadores de la empresa privada indican que el ingreso promedio mensual en el sector público es de 30-40 dólares y entre 150 y 200 dólares en el sector privado.
Otro punto de tranca con el gobierno es el convenio 87, pues en lugar de dar la libertad plena a los muchos trabajadores encarcelados y bajo régimen de presentación judicial, hace un par de meses condenó injustamente a 16 años de prisión a seis sindicalistas.
El directivo de la CTV indicó que el último contratiempo gubernamental fue la suspensión de la reunión del Foro de Diálogo Social que ocurriría en Valencia, estado Carabobo, entre el 4 y 5 de octubre.
En un giro de última hora, refirió Torres que el gobierno se reunió con los actores de la mesa en Caracas, pero para proponer que el encuentro del Foro sea pospuesto a enero de 2024.
Al ser consultado sobre si el juego gubernamental es causar cansancio y, por lo tanto, abandono de los actores al diálogo social, el sindicalista destacó que las centrales obreras opositoras (CTV, CGT y ASI) no renunciarán.
«Las centrales obreras no se retirarán del diálogo social pese a los obstáculos que ponga el gobierno», recalcó Torres.