El presidente de la Academia Nacional de Medicina, Enrique López Loyo, aseguró que la medida anunciada por Nicolás Maduro el pasado viernes para generar mayor restricción en los locales públicos ante los contagios por COVID-19, “tiene debilidades en el proceso”.
“Esta propuesta tiene una posibilidad de que pueda hacer un control, pero hay debilidades para lograr la efectividad. El Ministerio de Salud debe tener la capacidad de publicar la data de las personas, con su cédula de identidad, que han sido vacunadas tanto con primera como con segunda dosis”, dijo López Loyo.
Sin embargo, de acuerdo con la vicepresidenta de la administración de Maduro, Delcy Rodríguez, la plataforma “se desarrolló a través del sistema Patria”, por lo que para comer en un restaurante las personas tendrán que estar inscritas en la Big Data del gobierno.
“Si no han registrado su vacunación en el sistema Patria la app no marcará verde”, dijo este lunes el presidente de la Cámara Nacional de Restaurantes (Canares), Iván Puerta, en una entrevista en Circuito Éxitos.
De acuerdo con López Loyo, “la utilización de restaurantes como un mecanismo de inicio tiene una limitación porque la última Encovi indica que la pobreza en Venezuela alcanza el 94% de la población, por lo que se estaría haciendo un ensayo con el 6% restante”.
Agregó que, aunque como ensayo podría ser válido, “debemos considerar que el mayor riesgo de contagio está en las áreas con mayor presencia de personas, sobre todo en los mercados populares, en las vías públicas y en los bulevares. Ahí es donde se deben aplicar este tipo de medidas de restricción y control”.
López Loyo también hizo énfasis que esta medida generará un negocio para los laboratorios de pruebas diagnósticas porque la máxima duración de cada una es de 72 horas. Por ello “en todo momento deberían ser supervisadas por el Ministerio de Salud”, acotó.
Añadió que la implementación del “semaforo” también podría ser tomada como una posibilidad de cobros extras por parte de quienes ejercen el control en los locales, “como ha ocurrido con las alcabalas”.
Delcy Rodríguez indicó en los pasados días que a los restaurantes “deben ingresar las personas vacunadas y no contagiadas con COVID-19”. No obstante, no explicó cómo el sistema arrojará esa información.
Según lo indicado por representantes de Maduro a la directiva de Canares en una reunión breve hecha el pasado sábado, la data de vacunación es conocida mediante el sistema Patria y la información de contagio por los laboratorios privados.
“La aplicación está conectada a los laboratorios privados y así aparecen los resultados en la app”, dijo Puerta.
Frente a la medida, se alza el reto de que en esta plataforma haya una información sanitaria exhaustiva, además de que las personas cuenten con el dinero para hacerse una prueba de diagnóstico que como mínimo cuesta 30 dólares y no es costeada por el Estado.
Un plan piloto que comienza con los restaurantes
“Quiero anunciar que estamos trabajando sobre la base de que avanzamos en la vacunación. Estamos preparando un semáforo de acceso a algunos lugares públicos, que va a marcar verde cuando usted este vacunado y garantizado, amarillo cuando no esté vacunado pero sano y rojo cuando no esté vacunado y con una prueba positiva de COVID-19 en los últimos 21 días. Estamos pensando en arrancar este semáforo en la tercera semana de octubre en restaurantes”, dijo Maduro la tarde del viernes 8 de octubre cuando hizo pública la noticia.
Al respecto, Puerta aseguró que ese mismo día “nos contactaron muchos afiliados con sus preocupaciones”. Añadió que su respuesta a los locales de comida fue: “Mediante los contactos que tenemos en Europa les dimos un mensaje de calma porque es una medida que se está tomando en Italia, España y algunas ciudades de Estados Unidos y no contra nuestra cámara”.
Sin embargo, la interrogante de si esta acción es posible en un país con constantes fallas eléctricas y de comunicación, no tarda en aparecer. La factibilidad de este mecanismo de control depende de contar con un teléfono inteligente y con conexión a Internet.
“Todo esto está nuevo. Tuvimos una reunión express el sábado con el ministerio y con los días se irá ampliando la información. Pero debido a que la mayoría de los restaurantes tienen un celular empresarial no van a tener que comprarlo. No obstante, la factibilidad está en la conexión y en el interior del país hay que ver cómo funciona esto”, dijo Puerta.
El presidente de Canares señaló en el encuentro del fin de semana se le reiteró que si bien este plan empieza con los restaurantes, se ampliará. “Sabemos que entre ellos estarán los gimnasios, entre otros locales”.
Puerta contó que en la reunión probaron la aplicación con el número de su cédula de identidad y el sistema arrojó el color amarillo, lo que significa que no estaba vacunado. Sin embargo, lo está y mostró su carnet de inmunización, por lo que explicóque si a alguien le ocurre lo mismo podrá entrar al local con ese documento. Destacó que en su caso el amarillo se debe a que no actualizó su estado de vacunación en el sistema Patria.
“El plan es llegar a lo que pasa en otras ciudades, mantener todos los protocolos y vacunarse. Y por nuestra parte tratar de cumplir con los horarios y normas para poder estar en la normalidad lo más pronto posible”, expresó Puerta, quien calificó el último año y medio “de muchos retos” para el sector de restaurantes que en 2021 vive en “intermitencia, pero espera que se pueda trabajar por lo que queda del año”.
La Cámara Nacional de Restaurantes (Canares) explicó mediante sus redes sociales que tan pronto un cliente llega al local:
-El portero o anfitrión solicita al cliente su número de cédula y lo ingresa en la aplicación.
-Se verifica que el nombre en pantalla sea el del cliente.
-Se actualiza e indica:
-Verde. Si está sano y vacunado.
-Amarillo: Si no está vacunado, pero sano.
-Rojo: Si tiene una prueba positiva de COVID-19.
“Y así estamos seguros que en el sitio donde estemos no hay personas que puedan contagiar”, dijo Delcy Rodríguez el pasado viernes. Pero Venezuela sigue siendo uno de los países de Latinoamérica con el menor porcentaje de vacunación, según Our World In Data y la Organización Panamericana de la Salud. Además, tiene una baja tasa de detección de la enfermedad y un amplio subregistro de casos positivos, según indican desde el inicio de la pandemia los expertos venezolanos en salud.