En horas de la mañana de este jueves fueron presentados los resultados de la Encuesta de Coyuntura Industrial correspondientes al cuarto trimestre del año 2023, la cual fue elaborada por el Sistema de Información Estadística de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria).
De acuerdo con los datos obtenidos, la producción industrial privada creció comparada con el mismo período del año 2022. Las cifras también indican que el año 2023 sufrió una contracción del 4,3% con respecto al año anterior, dado los resultados adversos del primero, segundo y tercer trimestre, que cayó en 4,7%, 12,3% y 2,1%, respectivamente.
Luigi Pisella, presidente del gremio industrial, informó que el 77% de las empresas manufactureras privadas estimó que la situación económica de sus compañías estará mejor de cara al desempeño del año que recién comienza.
Asimismo, señaló que el índice de confianza industrial subió de 18,7% en el tercer trimestre a 34,4% en el cuarto trimestre de 2023.
En cuanto a los factores que impactan la producción de la manufactura privada, explicó que en primer lugar se encuentran los excesivos tributarios fiscales y parafiscales (76%), seguido por la falta de financiamiento bancario (69%), así como la baja demanda nacional dadas las limitaciones en el ingreso de los hogares (65%).
También, destacan la competencia de productos importados (63%) en cuarto lugar; el entorno macroeconómico, dada la alta inflación y el persistente desplazamiento del tipo de cambio (48%), de quinto, y en sexto lugar, la dificultad que tienen las empresas en acceder a divisas para cumplir con obligaciones de proveedores en el extranjero (40%).
«Algo que quizás llame la atención en este sentido, tiene que ver con el tema de los servicios públicos que ya no forman parte de los principales problemas que afectan a la industria, pero es importante señalar que los industriales han decidido comprar sus plantas eléctricas, comprar el diésel un poco más caro. Es un problema que están resolviendo los propios empresarios. La parte negativa es que se encarece la producción porque se elevan los costos, pero al final no se detiene la empresa por la falta de servicios públicos», comentó Pisella.
Del mismo modo, en el período octubre-diciembre de 2023, la capacidad utilizada de la manufactura fue de 37,5%, mientras que el 32% de la pequeña empresa usa menos del 20% de su capacidad instalada.
El SIEC también proporcionó información del comportamiento por tamaño de empresas, destacando que en el cuarto trimestre las grandes y medianas mostraron crecimiento de 9,1% y 14,6% respectivamente, pero las pequeñas se contrajeron en 5,9%.
Con relación al año 2023, solo las empresas medianas crecieron 9,9%, ya que las grandes cayeron 7,7% y las pequeñas registraron una disminución del 14,6%.
Política de estímulo fiscal para Venezuela
El presidente de Conindustria indicó que para que la manufactura nacional crezca sostenidamente, debe racionalizarle la aplicación de tributos.
“Desde Conindustria estamos a favor de una cultura tributaria para Venezuela. Esta debe estar alineada a una mayor recaudación, sobre la base de la ampliación de la cantidad de contribuyentes, y a una mayor actividad económica.
Según Pisella, es muy difícil para el industrial mantener un crecimiento sostenido con el incremento constante de tasas y tributos.
“El análisis de los datos del país demuestra que la economía venezolana ha crecido en materia de recaudación. Así que es necesario evolucionar hacia el estímulo de las condiciones para incentivar la formalidad y mejorar nuestra capacidad productiva. El incremento de la recaudación debe venir por mayor actividad económica, no por el aumento de tasas impositivas”, resaltó.
El encaje legal debe ubicarse en 20%
Si bien, es cierto que hubo un crecimiento del financiamiento bancario en el último año, este sigue siendo insuficiente, tanto para los industriales como para la economía en su conjunto. Por tal razón, Conindustria propone, por una parte, la reducción gradual del encaje legal, por la otra, que se otorguen créditos en divisas y que se le permita al sistema financiero tranzar en moneda extranjera, de cara a disminuir el costo del financiamiento.
«Si se baja el encaje legal de 73% a 20% de forma gradual, se liberarían 811 millones de dólares, que pudiesen ser utilizados para incrementar la producción nacional. Ahora bien, es importante que en nuestro país se permitan las transferencias en divisas y que los créditos sean otorgados en divisas, porque al utilizar la figura de los créditos indexados, prácticamente se vuelve imposible para las empresas pagar estos montos», indicó el gremialista.
Sectores con mejor desempeño
Los sectores industriales que mostraron buen desempeño durante el 2023, fueron alimentos (15,3%), madera y papel (14,7%), farmacéutico (5,2%), autopartes (2,3%), y maquinarias, equipo electrónico y óptica (0,3%).
Cayeron bebidas (25,0%), textil y calzado (11,6 %), químico (2,0%), plástico y caucho (13,5%), no metálicos (8,8%), fundición de metales y productos de metales (4,1%) y otras industrias (9,6%).
Es de hacer notar que en el cuarto trimestre del año en estudio, el sector bebidas creció 16,3%, siendo la política anti-contrabando, que vienen aplicando el Ejecutivo Nacional, uno de los principales impulsores de este aumento.
Al ser consultados sobre exportación de productos, el 42% de los industriales revelaron que sus empresas exportaron en el cuarto trimestre de 2023. De igual forma, el 83% señaló que importó durante ese mismo período.
Flexibilización de sanciones
El 93% de los industriales está de acuerdo con la flexibilización de sanciones económicas a entes del Estado venezolano por parte del gobierno de los Estados Unidos.
«El escenario de crecimiento en 2024 será más favorable en la medida que se mantengan estas medidas de flexibilización”, manifestó Pisella.
Por último, el presidente de Conindustria reiteró la necesidad de que se tomen en consideración las propuestas de políticas públicas que viene haciendo el gremio para la reindustrialización del país. Especialmente, para estimular a la pequeña industria que abarca el 62% del tejido industrial venezolano afiliado a las cámaras agremiadas en la Confederación, y que al cierre de 2023 presentaron una contracción de 14,6%.