Un caso digno de estudiar es el de Néstor Cortés, pitcher zurdo de los Yankees de Nueva York, que se ha catapultado como uno de los mejores lanzadores de las Grandes Ligas en este 2022. El cubano se ha ofrecido como el arma secreta, el As bajo la manga del mánager Aaron Boone.
En teoría, la rotación neoyorquina tendría en Gerrit Cole a su As; este sería seguido por un Luis Severino ya recuperado de su prolongada lesión, Jameson Taillon que llegó el año pasado con un importante cartel, y el zurdo Jordan Montgomery que fue formado en las granjas del equipo.
El puesto del antillano estaba llamado a ser el del quinto abridor de los ‘Mulos’. Recordemos que la zafra pasada figuró más como un relevista, que podía abrir juegos de forma eventual, en casos de emergencia.
En 2021, Cortés tuvo 22 presentaciones con el uniforme a rayas, de las cuales 14 fueron como abridor. Dejó efectividad de 2.90, con foja de dos ganados y tres perdidos; en 93 entradas de labor, le fabricaron 30 carreras limpias, recetó a 103 bateadores y le batearon para .217 de promedio.
Si ponemos la lupa en la actuación de Néstor la temporada pasada, podemos visualizar un altísimo número de abanicados, para la cantidad de entradas que lanzó. De hecho, haciendo el cálculo, el promedio de ponches por cada nueve entradas equivale a 9.97; es una cantidad bastante importante, para alguien que solo superó las seis entradas en cuatro de sus salidas.
A sus 27 años de edad, aunque parece que tuviera más edad, por su forma de manejarse en el montículo y también por su característico mostacho; ‘Hialeah Kid’, apodo que se ganó por haberse criado en la ciudad floridana de Hialeah, se muestra como uno de los lanzadores más dominantes de la MLB y –sin lugar para las dudas– el mejor de los Yankees en este momento.
Su efectividad de 1.70 se muestra como la cuarta mejor de todo el sistema de Grandes Ligas, solo por detrás de Justin Verlander (1.22), el venezolano Martín Pérez (1.60) y Alek Manoah (1.62). La suya, sin embargo, sería de 1.53, pero un mal movimiento del mánager Aaron Boone, y un pésimo relevo por parte de Wandy Peralta, le costó una carrera extra a Cortés.
En su actuación de anoche contra los Rays de Tampa Bay, otra magistral exhibición de dominio y control, el cubano lanzó ocho entradas en las que solo le conectaron cuatro indiscutibles, pasó a cinco rivales por el filo de sus strikes y no había permitido carreras.
No obstante, el zurdo salió para el noveno capítulo, en el que el único bateador que enfrentó le conectó de hit. Boone llamó a Peralta desde el bullpen, a quien le conectaron par de sencillos, cometió un ‘balk’ y le hicieron dos carreras; una de ellas iría a la cuenta de Cortés.
En su actuación, el ‘65’ de Nueva York llegó a retirar a 17 bateadores consecutivos y realizó un total de 109 pitcheos, la cifra más alta de su carrera, de los cuales 77 fueron strikes.
Además, en días pasados, a comienzos de mes, el hombre del bigote en Yankee Stadium, coqueteó con el juego sin hits ni carreras contra los Rangers de Texas; solo le conectaron un imparable y fue en el octavo episodio, con un out en la pizarra, que marcó su salida del encuentro.
Solo Justin Verlander, de los Astros de Houston, tiene un mejor whip en lo que va de temporada que Néstor Cortés. El del veterano de los siderales es de 0.72, mientras que el zurdo de los ‘Mulos’ exhibe un 0.85.
El whip, para quienes no estén familiarizados con el término, es una estadística muy detallada, que guarda la relación entre los boletos y los hits que concede un lanzador, por cada nueve entradas lanzadas. Si se quiere, este departamento es más importante que la efectividad, a la hora de medir el impacto y dominio de un lanzador.
Puede que parezca incierto, pero a día de hoy, este joven nacido en Cuba, estaría peleando por el premio Cy Young de la Liga Americana. De hecho, de mantener el ritmo que lleva hasta el momento, será un firme candidato a llevarse el premio; algo que no logra ningún pitcher yankee, desde que lo hiciera Roger Clemens en 2001.
Haciendo historia dentro de la historia
para soltar la pelota
La actuación de Néstor Cortés en la temporada, no es algo que pase desapercibido o que vaya a pasar por debajo de la mesa. El performance que ha mostrado el antillano esta temporada, es algo que trasciende en el tiempo y que lo coloca entre figuras de gran renombre, en la historia de la franquicia yankee.
Néstor tiene la efectividad más baja (1.70) para un lanzador de los Yankees, en sus primeras nueve aperturas, desde el japonés Hideki Irabú en 1998 (1.45). A su vez, es el primer lanzador en la historia de la organización, con efectividad por debajo de 1.75 y al menos 60 abanicados, en un mismo lapso de nueve apariciones.
Asimismo, el zurdo ha permitido tres carreras limpias o menos en 18 aperturas consecutivas; ubicándose a solo dos de empatar el récord como miembro de los ‘Bombarderos del Bronx’, el cual fue establecido por Russ Ford en 1910.
Estos son los últimos lanzadores abridores de los Yankees con efectividad de 1.70 o menos en los primeros 45 juegos del equipo: Whitey Ford (1956 y 1964), Ed Figueroa (1977), Phil Nierko (1984), Néstor Cortés (2022).