Solo faltan 72 horas para que el Banco Central de Venezuela lleve a cabo un nuevo proceso de reconversión monetaria en el país, el cual tiene como objetivo agilizar todas aquellas transacciones que se hagan dentro del territorio nacional.
El Observatorio Venezolano de Finanzas realizó este lunes el foro “A tres días de la reconversión monetaria” para explicar más a profundidad en que consistirá la eliminación de seis ceros del cono monetario actual y la implementación del nuevo bolívar digital.
Los economistas Rosamnis Marcano y Luis Arturo Bárcenas coincidieron en que esta medida no tendrá ningún impacto macroeconómico profundo y tampoco se transformará en una mejora para la capacidad de compra de los ciudadanos.
“La reconversión actual ha sido menos noticiosa porque el venezolano ya está acostumbrado a ver como el poder adquisitivo de su moneda local se ha perdido y ha empezado a sustituir el bolívar por transacciones en otras divisas. Esta es la tercera reconversión en 13 años. En la primera se eliminaron tres ceros (2007), en la segunda se eliminaron cinco ceros (2018) y ahora con el bolívar digital se van a eliminar seis ceros. En total se han eliminado 14 ceros al bolívar desde el 2007”, precisó Marcano.
La también economista señior de la firma Emfi Securities considera que el nuevo cono monetario es muy sencillo porque está conformado solo por cinco billetes y una moneda. Sin embargo, advirtió que podrían existir aumentos de precios de algunos productos y servicios por la adecuación al nuevo cono monetario.
“En los próximos días podríamos evidenciar un incremento en los precios de algunos productos y servicios en Venezuela. Por ejemplo, el precio de la gasolina subsidiada, si se mantiene al precio actual de 5.000 bolívares el litro solo podrá ser pagado de forma digital, porque con una moneda de 1 bolívar que representará 1 millón de bolívares soberanos, se pueden pagar 200 litros de combustible subsidiado”, detalló.
Aseguró que los procesos de reconversión monetaria son costosos, tanto para los bancos centrales como para las empresas que deben adecuar toda su plataforma.
“Con la reconversión se deben hacer cambios contables en las empresas, cambios en el software informático de pago y de nómina. Todas aquellas personas, empresas públicas y privadas deben adecuar sus procesos de facturación a la nueva expresión monetaria”, dijo.
En cuanto al nombre de bolívar digital, indicó que hasta el momento el Banco Central de Venezuela no ha aclarado bien el término. Explicó que no se puede comparar con procesos de digitalización que vienen haciendo otros países con economías estables.
“Hay personas que están confundidas porque cuando se habla de digitalización, muchos piensan que es la emisión por parte del Banco Central de una moneda digital. Sin embargo, esto no es lo que sucede en Venezuela”, agregó.
Señaló que China y varios países del mundo han comenzado a emitir monedas digitales, “pero en nuestro país lo que se está promoviendo es la modalidad del pago digital, lo que conocemos como P2P o pago móvil, pagos a comercios mediante esta vía. Muchas personas se han habituado a utilizar estos medios digitales para hacer sus transacciones y esa es la principal meta del gobierno, que la mayoría de las personas utilicen medios digitales de pago y eviten el uso del papel moneda”, sostuvo.
Marcano indicó que esta nueva reconversión monetaria no tendrá ningún impacto en la hiperinflación. “Si hablamos de los beneficios de la reconversión, podemos decir que ayudará con las transacciones comerciales. También mejorará la escasez de efectivo y permitirá a las empresas tener una mejor manera de llevar sus procesos contables. Sin embargo, si la reconversión no viene acompañada de un plan macroeconómico de ajustes, los beneficios serán temporales y la hiperinflación obligará nuevamente al gobierno a realizar nuevas reconversiones”, precisó.
Podría tener sus días contados
Luis Arturo Bárcenas, economista Señior de la firma Ecoanalitica, explicó que, según estudios realizados, si no existen medidas para controlar la hiperinflación en el país, la nueva reconversión monetaria en Venezuela podría tener una duración de 40 a 60 meses.
“La reconversión no tiene mayor sentido en términos de políticas públicas. Esto es simplemente una atención o una curita a una enfermedad cada vez más grande que es la hiperinflación. Pero también es la atención a un sector privado que lleva más de un años reclamando una medida de este estilo para poder hacer más fácil sus transacciones”, señaló.
Aseguró que a partir del primero de octubre habrá una reconversión de precios y salarios, pero no habrá ningún tipo de empoderamiento para la población porque la capacidad de compra de bienes y servicios seguirá siendo la misma.
En cuanto a la decisión por parte del gobierno de mantener por un tiempo dos conos monetarios en el país, Bárcenas afirmó que esto demuestra una importante falta de recursos económicos para el proceso de reconversión monetaria.
“Llama la atención que el gobierno hasta la fecha no ha dicho cuánto tiempo podrán convivir los dos conos monetarios y eso puede traer algunos problemas al momento de realizar pagos y transacciones”, sostuvo.
Expresó que los procesos de reconversión monetaria en el mundo entero son bastante normales y no hay que tener ningún tipo de temor porque los bancos centrales y el sistema financiero tienen la capacidad de realizar este tipo de procedimientos sin ningún tipo de consecuencias negativas para los ciudadanos.
El representante de Ecoanalitica coincidió con Marcano al señalar que el bolívar digital no tiene nada que ver con los activos digitales que vienen creando distintos bancos centrales.
“El bolívar digital es simplemente una nomenclatura que eligió el Banco Central de Venezuela para hacer referencia a la ampliación de la digitalización de las transacciones. Esto no tiene absolutamente nada que ver con el termino monedas digitales. Recordemos que en el país no habrá muchos billetes y, por tal motivo, se busca que la gran mayoría de las transacciones se hagan de manera digital”, dijo.
Insistió en que mientras no haya un plan de recuperación económica que controle a la hiperinflación, las reconversiones monetarias serán un “placebo” y tendrán que realizarse de manera continua en el país.