Vamos a hablar de tres retos fundamentales que tiene el sector privado para 2023 después de un año tan complejo como 2022, donde el sector privado enfrentó problemas ligados al costo de vida en dólares, financiamiento y competencia. Prácticamente estas son las mismas preocupaciones o los mismos elementos que tiene que mirar el próximo año.
Respecto al costo de vida en dólares es importante destacar que este año estamos estimando un incremento de 50% comparado con el año 2021 y para 2023 estamos pensando que el mismo esté en torno a 35%.
Este es el principal reto para el sector privado: cómo lograr adecuar sus costos y gastos ante esta realidad y poder moderar los ajustes de precios de cara a los clientes para no perderlos o para no ver una reducción de las ventas.
Es muy complejo en Venezuela que las ventas crezcan de forma significativa si el poder adquisitivo en dólares no crece y si los precios están creciendo en estas magnitudes.
Así que la clave para el sector privado es meterle cabeza al tema de costos, de gastos, de optimización, de transformación, de uso de la tecnología que le permita moderar el crecimiento de los precios.
Esto aplica para empresas que están en consumo masivo, que se enfrentan a una mayoría de consumidores y no necesariamente en los nichos, porque en los nichos entran otras particularidades.
El segundo elemento a destacar para el año próximo es el financiamiento. Este año los créditos han subido alrededor de 30% en dólares comparado con el año pasado, pero sigue siendo muy insuficiente.
La banca solo atiende 10% de las necesidades del sector privado. Así que el financiamiento sigue siendo escaso, pero también costoso, con tasas de interés que superan el 15% anual.
Pero, incluso, cuando incluimos el costo asociado, el costo de financiamiento puede ser superior al 20%. Sin contar el efecto de la devaluación, que estamos hablando de créditos indexados.
Así que el tema clave es mirar cómo se puede acceder a fuentes alternativas de financiamiento, la Bolsa de Valores de Caracas, inversionistas privados, o cuidar de forma esmerada el capital de trabajo propio, porque cualquier decisión errónea puede tener un costo significativo para la organización.
Me gustaría decirles que el crédito va a abundar en 2023, pero lamentablemente no es así. De manera que conviene ser muy cuidadoso en las decisiones financieras para el próximo año.
Y, por último, el tema de la competencia, especialmente la apertura de la frontera con Colombia, que puede significar una entrada masiva de productos colombianos que son altamente competitivos.
Colombia ha ganado en competitividad, mientras Venezuela ha perdido competitividad. Y eso, por supuesto, es un reto mayúsculo; sobre todo, para la producción local, para quienes producen en Venezuela.
Así qué es muy importante evaluar tu sector, la vulnerabilidad de tu sector respecto a Colombia. Sectores críticos como textiles, calzado, alimentos son elementos a mirar.
Estos son tres puntos clave que el sector privado tiene que tener en cuenta para 2023.