Las fallas actuales en el sistema eléctrico nacional (SEN) serán más prolongadas y frecuentes por el impacto del fenómeno climático El Niño que ya está presente en la Amazonia, aseguraron fuentes calificadas del sector energético que solicitaron guardar sus nombres en reserva.
«Hace un mes que apenas llueve en el estado Bolívar, por lo que está el temor de la bajada de los niveles de agua en el embalse de la central hidroeléctrica de Guri», alertó un consultado.
Agregó que una menor cantidad de agua en Guri representaría limitaciones para enviar electricidad al SEN.
Guri proporciona casi 70% de la energía (hasta 7.500 Megavatios) que envía al SEN a través del sistema interconectado nacional.
Las fuentes explicaron que actualmente hay un déficit de unos 1.200 MW en el suministro de energía para cubrir las demandas pico de entre 10.500 y 11.000 MW.
«Con la llegada de El Niño ese déficit se incrementa, por lo que no habrá suficiente energía disponible desde Guri para atender el mercado eléctrico nacional», sostuvo un consultado.
Añadió que con un sistema eléctrico en equilibrio la generación de energía de origen térmico saldría al rescate para cubrir el faltante de Guri.
«En Venezuela el sistema eléctrico atraviesa desde hace años serios problemas técnicos y operativos por la falta de inversión y mantenimiento. Esto hace que el parque de centrales termoeléctricas funcione, si acaso, a 20% de su capacidad instalada de unos 16.000 MW», precisó un consultado.
A la espera de los recursos
Las fuentes instaron a las autoridades a aportar soluciones -efectivas más allá de los racionamientos forzosos a los usuarios- en el corto plazo para minimizar otra crisis energética por El Niño como las de 2.010 y 2.014.
En mayo, Nicolás Maduro instaló una comisión presidencial -encabezada por la vicepresidenta Delsy Rodriguez- encargada de atender la contingencia de El Niño.
«Hay una amenaza de una sequía extrema que podría ser prolongada», dijo Maduro entonces.
Las fuentes revelaron que hasta el presente no se registran avances significativos en el plan de contingencia.
«El gobierno se centró en los recursos del fondo fiduciario de ayuda humanitaria a Venezuela de 3.200 millones de dólares administrado por la Organización de Naciones Unidas, producto de los acuerdos del diálogo entre el oficialismo y la oposición «, recordó un consultado.
Sin embargo, advirtió, que la autorización de la ONU se dio este miércoles luego del acuerdo suscrito entre el gobierno y la oposición en Barbados.
Del fondo mencionado, 1.100 millones de dólares corresponden al sector eléctrico.
Se complica el panorama eléctrico
«Hay mucho que hacer y en poco tiempo porque El Niño ya está en la Amazonia», dijo un consultado.
Entre las medidas urgentes y prioritarias a tomar en Venezuela está la reposición de líneas de la red de distribución, así como la reparación y repontenciación de las máquinas -operacional y estratégicamente más aptas- del parque termoeléctrico nacional.
Sin embargo, las fuentes consideraron que será difícil cubrir con termoelectricidad la totalidad de la energía que Guri deje de enviar al SEN, debido el poco tiempo disponible dada la magnitud de los trabajos en las plantas termoeléctricas.
Otro foco de atención es el suministro de diésel a las centrales térmicas, debido al déficit existente de la producción del combustible en las refinerías del país.
«Será necesario importar el diésel o suspender los envíos de combustible a Cuba», sostuvo un consultado.
Las fuentes advirtieron que el panorama eléctrico nacional luce «muy complicado y delicado», pues con El Niño se profundiza la ya de por sí grave situación eléctrica actual.
En este contexto, agregaron las fuentes, la Corporación Eléctrica Nacional (Corpoelec) profundizaría su programa de administración de carga (racionamientos) que ahora implica cortes interdiarios de energía de 2 a 6 horas fundamentalmente en el interior del país.
A esto se suma la vulnerabilidad del SEN, que ocasiona fallas y apagones, de los cuales ni Caracas se salva.