El incremento del bono alimentación -cestaticket-, que pasó de 45 bolívares a 40 dólares indexados a la tasa de cambio del Banco Central de Venezuela (BCV), deberá ser cancelado obligatoriamente a todos los trabajadores, tanto de la administración pública como del sector privado, según lo anunciado por Nicolás Maduro el 1° mayo.
De acuerdo con Orlando Camacho, presidente de Fedeindustria (Federación de Artesanos, Micros, Pequeñas y Mediana Industrias y Empresas de Venezuela), ahora estos 40 dólares deberán entrar en los registros de contabilidad del sector privado para garantizar el pago de los cestaticket a los trabajadores, que en promedio pasarán a cobrar entre 120 y 180 dólares al mes.
«Claro que tiene impacto dentro de los costos y pagos a trabajadores del sector privado (…) La mayoría de las industrias y Fedeindustria pagaban solamente el bono de cestaticket al valor que estaba estipulado en la Ley (45 bolívares)”, indicó.
Ahora, a partir de este mes de mayo, “todas las empresas e industrias deberán pagar este aumento de 40 dólares, que va a impactar dentro del ingreso total del trabajador, lo que es positivo también, porque el trabajador requiere de más ingresos», dijo Camacho.
El representante gremial dijo que, aunque 40 dólares «suena poco», considera que el presidente Nicolás Maduro «hizo lo correcto con los ingresos de la nación que tiene», entendiendo que Venezuela sólo tiene dos fuentes de ingresos: Seniat y Pdvsa, que “han sido afectadas por la crisis económica, falta de productividad nacional y las sanciones”.
A su juicio, el sector privado del país sí cuenta con las garantías para poder cancelar estos 40 dólares por concepto de bono de alimentación.
«Justamente el sector privado productivo tiene mayor facilidad, porque tiene ingresos que le permite comercializar y vender”, afirmó Camacho. Sin embargo, este aumento, agregó, «puede poner en riesgo a los muy pequeños comercios, que seguramente son los mismos propietarios o emprendedores».
Enfatizó que el sector industrial de Venezuela trabaja a 30% de la capacidad instalada, que en los últimos años también se vio afectado por las sanciones económicas y la migración venezolana.
«Las empresas que eran grandes pasaron a ser medianas o pequeñas, es decir, aún están a baja capacidad, pero tienen menos personal y, por eso, tú puedes asumir el reto de pagar los 40 dólares», señaló el representante de Fedeindustria, al comentar que este pago será sostenible siempre y cuando se mantenga la ligera recuperación económica o mejore la productividad nacional.
Asimismo, el dirigente gremial puntualizó que la mayoría del sector privado cancela a los trabajadores el pago mínimo que corresponde por ley (130 bolívares mensuales) y adicionalmente, lo que pagan son bonificaciones con base en el dólar, «bien sea por productividad, ventas, comisiones, transporte, entre otros».
Aumento de cestaticket no estaba contemplado en la mesa tripartita
Aunque Camacho está de acuerdo con los ajustes que realizó Maduro el pasado 1° de mayo, aseveró que el aumento de los cestaticket no estaba contemplado en la mesa tripartita que se desarrolla entre el Ejecutivo, Fedecámaras, Fedeindustria y los principales centrales sindicales del país.
«No estaba contemplado dentro de nuestras contabilidades. Nosotros que participamos en la mesa tripartita no lo teníamos previsto. Pensamos que íbamos a salir sin pagar ningún aumento adicional porque estamos por encima del pago de los trabajadores en forma de bonos, no de salarios», apuntó Camacho.
Agregó que «para nosotros (Fedeindustria) fue habilidoso, no contábamos con la astucia del presidente (Maduro), no lo teníamos en el radar. Otra cosa que no esperábamos era que el pago fuera indexado en dólares».
Orlando Camacho estima que hay alrededor de 5 millones de pensionados en el país, mientras que hay cerca de 3 millones de trabajadores activos en la administración pública, por lo que considera que Maduro autorizó subir los cestaticket «para que no influyeran en el escalafón de trabajadores», precisamente porque el Estado no tiene la capacidad de garantizarlo.
Además, indicó que el sector privado -industria, comercio y servicios-, agrupa alrededor de 4 millones de trabajadores formales.
Sólo 183.000 trabajadores son favorecidos en el sector industrial
Por su parte, la abogada y presidenta de la Comisión de Asuntos Laborales de Conindustria, Maryolga Girán, considera que se debería esperar por la publicación de la Gaceta Oficial sobre los ajustes en las bonificaciones anunciadas por Maduro. «Se rumora que viene con cambios», acotó.
Dijo que «la industria cuenta ahorita con 183.000 trabajadores aproximadamente a nivel nacional. Esos son los favorecidos por el bono alimentación, frente a más de 5 millones de trabajadores oficialistas».
Girán explicó que la empresa privada paga “el cestaticket socialista por el monto exacto del Decreto (45 bolívares), pero da adicional un bono de alimentación convencional que tiene un promedio de 50 dólares en la industria. No sé en el sector comercio cuánto es, pero hay empresas de servicio multinacionales que dan un bono de alimentación de 500 dólares a sus gerentes. Pero eso es excepcional», afirmó.
El Dato
Según declaraciones de José Adelino Pinto, especialista en Administración de Empresas mención Finanzas, 49% del sector privado “pagaba lo estipulado” en cuanto al tema del bono alimentario, mientras que 51% no fue afectado “porque su ticket estaba por encima del valor anunciado”.