Cuando comenzaba la temporada de la NBA, las expectativas en torno a los Lakers de Los Ángeles eran altísimas. No era para menos, ya que a la mediática dupla conformada por LeBron James y Anthony Davis, se les sumaban las llegadas de Carmelo Anthony y Russell Westbrook, que en el papel los colocaba como un ‘dream team’ y fuerte candidato a competir.
Del dicho al hecho, hay mucho trecho; o eso dicen por ahí. Y las cosas no salieron bien en la temporada para el equipo angelino. La inestabilidad se hizo presente durante toda la campaña para los de oro y púrpura, al punto de quedar eliminados de los playoffs.
Como lo reconocía el propio AD3, el equipo fue tan inconsistente que el jugador ironizó con que hubo más quintetos abridores que victorias para el quinteto californiano.
El propio Davis fue de los jugadores que más ausente estuvo en la temporada, pues sus constantes problemas físicos lo alejaron del tabloncillo por demasiado tiempo. Hasta ahora, de 79 juegos que han disputado los Lakers, el estelar Ala-Pivot solo ha participado en 40, lo que lo deja prácticamente con la mitad de los juegos de la temporada.
Entre sus lesiones, el jugador de 29 años, sufrió un esguince de tobillo que le dejó fuera mes y medio entre el 16 de febrero y el 1 de abril.
Para Davis fue determinante el hecho de que el ‘big three’ de los Lakers no pudiera compartir suficiente tiempo de juego en cancha. «Es difícil ganar cuando tus tres mejores jugadores no pueden tener tiempo juntos en la pista. Nos gustaría ver qué pasaría si hubiéramos estado a disposición todo el año», dijo el puesto cuatro, en referencia a James y Westbrook.
Por su parte, Westbrook ha sido cuestionado casi desde su llegada a Los Ángeles, ya que el base ha estado constantemente lejos de mostrar su mejor versión en cancha. A diferencia de su compañero, el piloto de 33 años ha disputado casi todos los partidos (78 en total), pero su nivel no ha estado a la altura de lo esperado.
Con excepción de sus dos primeros años en la NBA, el promedio de puntos por partido de Westbrook, de esta temporada (18.5), es el más bajo de su carrera. El jugador ha sido tan duramente criticado, e incluso abucheado en el Crypto.com Arena de Los Ángeles, que incluso ha dicho que no quiere llevar a su familia a los juegos, para que no tengan que pasar por esa situación.
El caso de LeBron James es completamente diferente, ya que el alero está viviendo una gran temporada a nivel individual, con números tan buenos –o incluso mejores– a los que tiene acostumbrado. Incluso, algunos creen que, de no ser por el mal año colectivo, el oriundo de Akron debería ser considerado para el premio al Jugador Más Valioso de la temporada.
En 56 compromisos, James promedia 30.3 puntos, 8.2 rebotes y 6.2 asistencias. Esta es la mejor media de puntos de LeBron, desde la temporada 2005-2006, cuando obtuvo 31.4 al finalizar el año. Es la tercera vez en su carrera que promedia por encima de la treintena de puntos.
La principal figura de los Lakers también ha intentado quitarle responsabilidad a Westbrook, a quien señalan como el culpable de que el proyecto fuera un fracaso. «Al final del día estamos todos juntos, con Russ. No hay un tipo al que puedas culpar por encima de otro, todos ganamos y todos perdemos”, manifestó James.
Lo cierto es que la temporada angelina ha sido desastrosa, sufriendo algunas de las peores derrotas de su historia, con un récord lamentable de 31 victorias y 48 reveses. El equipo dirigido por Frank Vogel sumó siete derrotas en fila, al caer este martes contra Phoenix Suns, lo que los deja matemáticamente fuera del play-in.
Tanto Westbrook, como el coach Vogel, podrían tener las horas contadas en las filas de púrpura y oro. Al base ya intentaron reubicarlo en otro equipo, antes de la fecha límite de cambios; y el estratega parece no figurar en los planes.