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La Cámara Nacional de Intermediarios del Mercado de Valores (Canimev) tiene nueva junta directiva, cónsona con el momento particular en el que se encuentra la economía venezolana y donde se requiere una combinación de experticias, nuevas ideas, buenas motivaciones y estímulos para hacer crecer el mercado de valores, que también es determinante para el crecimiento económico de cualquier país.
“Esta junta directiva surgió como un proceso natural, no fue un diseño predeterminado”, asegura Ramiro Molina, presidente de la Canimev. Explica que está integrada por “un relevo generacional importante”, combinado con la experiencia que han acumulado los que -al igual que él- tienen muchos años en este mercado.
Para Molina, el mercado de valores venezolano siempre ha estado con una capacidad disminuida, por lo que no ha hecho el aporte que tiene que hacer a la economía y a la sociedad. De allí que el propósito de esta nueva junta directiva haya sido reunir “a todas esas personas que, por sus propios méritos, han ido participando en el mercado de valores venezolano, junto con los que hemos estado insistiendo en que no se debe dejar morir, sino que debe impulsarse de una manera ordenada, profesional y con todas las mejores prácticas internacionales que hay sobre este mercado”.
También en la junta directiva hay una presencia importante de profesionales mujeres que tienen mucho que aportar por sus méritos. “Nos da, además, una oportunidad de reflejar lo amplio que en esta profesión con respecto al rol de las mujeres. En la junta directiva necesitamos también mostrar una visión y una sensibilidad que tiene un alcance un poco mayor del que tradicionalmente tenía”, señala Molina.
Lo que se propone la nueva junta directiva
La nueva junta directiva se ha fijado dentro de sus planes y objetivos varias metas. Lo primero es promocionar el mercado de valores. “Es darlo a conocer, hacerlo visible y hacerlo visible significa no solamente al entorno empresarial más cercano, sino a la comunidad en general, donde hay muchas lagunas sobre qué es exactamente el mercado y para qué sirve”, indica Molina.
Así que la intención es promocionar la cultura bursátil y financiera no solamente desde el punto de vista del negocio, sino del impacto que puede tener en el bienestar financiero de cada persona o familia. Por lo tanto, la Canimev se enfoca en fomentar cultura bursátil en todos los ámbitos, incluyendo a las universidades, con las que está desarrollando convenios.
“Queremos elevar la exposición del mercado de valores, sobre todo en las universidades donde se forman los profesionales que luego trabajan en el mundo financiero, porque poco se dice en las universidades venezolanas sobre el mercado de valores venezolano”, expresa Molina.
Sin embargo, aclara que es una formación que le sirve a todo el mundo, porque tiene que ver con cómo las personas organizan sus finanzas personales, sus ahorros, inversiones, patrimonio familiar, herencias, es decir, desde lo más básico hasta lo más sofisticado.
Lo segundo, explica Molina, es que todo debe hacerse en un mercado regulado, enmarcado en una ley, reglamentos y normas. “Cuando hablamos de ahorro y de inversión estamos hablando del bienestar de las personas, de la sociedad y eso tiene que hacerlo gente seria, responsable y, además, supervisada por la Superintendencia Nacional de Valores, porque necesitamos autorizaciones, aprobación de los productos y demostrar que hay capacidad, transparencia, responsabilidad, de cara a los clientes, ya sean personas naturales o empresas”, afirma.
Molina advierte que se trata de un trabajo continuo porque en el mercado de valores hay innovación tecnológica, innovación financiera, nuevos productos, nuevas prácticas, por lo que siempre hay que actualizar y modernizar, “cuidando que los principios como la transparencia, la responsabilidad, la rendición de cuentas y la eficiencia en la prestación del servicio y en la entrega de un producto no se violen”.
Y lo tercero se desprende también de la labor de promoción y exposición del mercado, pero se complementa con una labor más precisa y detallada, que es el trabajo directo con las empresas para ayudarlas a buscar mecanismos de financiamiento idóneos, adecuados a las necesidades particulares de cada quien.
“Esa labor de asesoría, de orientación, es bastante importante porque no solo se trata de dejar claro cómo beneficiarse, sino cuál es la mejor manera de hacerlo dentro del marco legal, pero también dentro de todas las posibilidades que ofrecen las finanzas, que son un campo de inversión continua”, señala.
Molina afirma que los miembros de la Canimev son cruciales en todo ese proceso, porque son los que producen los activos a partir de las empresas para presentárselos a quienes quieran comprar o invertir. Para eso necesitan asegurarse de que todo ese proceso sea hecho no solo dentro del marco de la ley, sino dentro de un marco en donde todos salen ganando.
“Los intermediarios somos claves. Por eso, esta junta directiva tiene dentro de su propósito de impulsar el mercado, mejorar todos los procesos internos, velar por el cumplimiento de todos los requisitos legales que, al mismo tiempo, ayudan en la promoción hacia el sector privado y el sector público. Así como hacer entender que este es un mercado muy importante que puede cumplir un rol como propulsor del financiamiento y de la solución de problemas financieros para empresas y para el mismo gobierno, como se hace en muchos países del mundo”, expresa.
Cuatro comités en áreas específicas
Para cumplir con los objetivos y organizar a los profesionales e instituciones afiliadas a la Canimev, la junta directiva organizó cuatro comités en áreas específicas de experticias. Primero, para convocar la participación de los afiliados que quieran avanzar en cada uno de esos campos y, segundo, para hacerlo más eficiente a la hora de tener que llegar a acuerdos con las autoridades o proponer nuevos productos y servicios. Y estos son:
-Comité de promoción del mercado: tiene que ver con educación financiera, organización de eventos públicos, alianzas con universidades y la generación de contenido y material educativo.
“Hemos hecho esfuerzos dirigidos a colegios, universidades, cámaras e instituciones muy diversas. Para eso contamos dentro del mercado con casas de bolsas, asesores financieros, corredores públicos, docentes universitarios y aprovechamos eso para orientar en las presentaciones o charlas donde nos inviten, o donde nosotros pedimos que nos inviten”, comenta Molina.
-Comité de nuevos productos e innovación financieras: ante un sistema financiero tan cambiante, con un impacto tecnológico importante, y también debido a las circunstancias que ha vivido la economía venezolana en años recientes -con complejidades cambiarias, inflacionarias y multimoneda- se han tenido que diseñar productos nuevos adecuados a esas nuevas realidades para que efectivamente puedan ser soluciones a problemas financieros de inversionistas.
“Este comité evalúa, propone estudios y convoca a todos los asociados que quieran trabajar en eso. También es la instancia que prepara cualquier propuesta que quiera llevar el mercado a la Superintendencia para la aprobación de un nuevo producto o servicio”, señala Molina.
-Comité de cumplimiento: dada la normativa existente contra la legitimación de capitales, financiamiento al terrorismo y delitos financieros, las casas de bolsas requieren disponer de todos los “radares” para detectar cualquier problema que pueda surgir y que atente contra un mercado transparente y cumplidor de las normas.
“Este comité es sumamente activo porque la normativa es muy extensa, no es específica de Venezuela, sino que es una normativa internacional que Venezuela sigue. Y también a través de convenios internacionales sobre las prácticas en este asunto, porque la legitimación de capitales y financiamiento del terrorismo es un problema mundial. Además, por ley todas las casas de bolsas, e incluso los emisores de valores, necesitan tener un personal entrenado y cumpliendo la normativa preventiva sobre legitimación de capitales”, afirma Molina.
-Comité de contabilidad y de procesos: se busca revisar lo que no solo está en las regulaciones sobre los procesos operativos, contables que deben llevar las casas de bolsas como instituciones financieras, sino también mantener el foco en los avances tecnológicos y nuevas normativas en vista de que es necesario la adecuación continua.
“En vista de la innovación tecnológica a nivel mundial, siempre hay alguna manera de mejorar los procesos y los sistemas para que estemos seguros de que se cumplen con todas las normas de protección de todos los intereses de los clientes. También hay nuevas regulaciones que nos hacen cambiar procesos y eso hace que necesitemos revisar las cuentas contables, los reportes, los mecanismos de rendición de cuentas a clientes a las autoridades. De manera que este comité de contabilidad y procesos trata de que estemos al día de la mejor manera”, asevera Molina.
La nueva junta directiva de la Canimev está integrada por Ramiro Molina, presidente; Juan Domingo Cordero, vipresidente; y Emilio Antelo, Félix Méndez, Antonio Dalvano, Stephany Suárez, María Emperatriz Salazar, Carlos Guruceaga, Diego Alexandre y Santiago Puppio en calidad de directores.
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