Ante la proclamación de Pedro Castillo como nuevo presidente de Perú por parte del Jurado Nacional de Elecciones (JNE), en una sesión virtual realizada el pasado lunes 19 de julio, y con él la llegada de un gobierno de izquierda, los venezolanos que emigraron a dicho país expresan sus preocupaciones.
“Tengo un sentimiento de incertidumbre y un poco de molestia porque lo primero que le viene a uno a la mente es: ‘No vale, ¿¡otra vez!?’. Realmente lo que a uno le pega es el hecho que fue muy difícil tomar la decisión de salir del país, de dejar a los suyos y todo lo que uno conoce, con la esperanza de empezar de cero en otra nación, y de la nada se esté de vuelta a donde uno empezó”, dice Neptalí Toribio.
Dos años y seis meses tiene Toribio viviendo en Perú y recuerda que partir de Venezuela le tomó muchos años. “Mi experiencia ha sido buena, teniendo en cuenta que he podido ayudar a mi familia, lo que para mí es muy importante, aunque los tenga lejos. He podido desarrollarme más en mi área profesional, pero la verdad es que vivir nuevamente un proceso socialista es algo que no tengo pensado hacer bajo ninguna circunstancia”.
Para Carolina Estrada, quien llegó a Perú en febrero de 2018, su realidad es diferente a la de Toribio. Pasó de ser una de las personas que sustentaba a su familia a depender de sus hijos. Para ella, “la victoria de Pedro Castillo fue una sorpresa, no se escuchaba por ningún lado y de repente ganó”.
María Eugenia Colmenares afirma que el resultado demuestra que “vamos muy mal. Nosotros que ya lo vivimos siempre lo advertimos, pero el peruano decía lo mismo que el venezolano en su momento: nosotros no somos Venezuela y antes en Venezuela decíamos que no éramos Cuba y miren cómo terminamos”.
Agrega que la campaña de la xenofobia en Perú “ha sido muy grande y ha hecho que nos tengan rabia y que cada día pidan más y más papeles”. Además, puntualiza: “Sé que nos vamos a ver muy afectados porque esta es la gota que haría que nos sacaran. Si antes nos ponían muchos peros ahora será peor”.
Por su parte, el embajador de Venezuela en Perú designado por Juan Guaidó, Carlos Scull, felicitó a Castillo la noche del lunes 19 de abril cuando el Jurado Nacional de Elecciones de Perú lo proclamó.
Deterioro de la economía desde las elecciones
Desde el día de las elecciones, el dólar en Perú se incrementó y esta realidad sumada a las consecuencias que genera son rápidamente comprendidas por los venezolanos en dicho país.
“Viendo la situación actual y si hacemos una comparación con la situación política de Venezuela en 1998, sabemos que de llevarse a cabo irán deteriorando la economía a pasos agigantados”, indica Neptalí Toribio, quien añade que el dólar a principios de año y antes de las elecciones estaba en 3,50 soles el cambio, y actualmente está en 4 soles por dólar.
Explica que, aunque a las personas en Venezuela les puede parecer que este aumento es poco frente al que vive Venezuela, “con la situación económica que se vive actualmente, donde muchos se les ha venido complicando obtener un empleo fijo, es bastante significativo”. “En lo personal, con mi sueldo podía apoyar más cómodamente a mi familia en Venezuela, y con los recientes cambios se ha ido disminuyendo esa ayuda y los mercados que hacía semanalmente empezaron a subir su costo poco a poco”, agrega.
Castillo asumirá el cargo de presidente el 28 de julio y “sin este señor haber tomado el mando ya nos afecta económicamente”. “Todo ha subido el triple, no hay gasolina, cuando lo normal era pasar por una bomba y listo. Ahora se ven avisos informando que no hay gasolina ni gas. Y, en lo social, las personas que lo apoyan son sumamente agresivas y adoptamos no opinar para evitar”, expresa Estrada.
Ante los problemas económicos, Colmenares dice sentirse muy mal porque, “a pesar de que la economía de Perú no es la más estable, acá puedes solventar con lo que ganas”. “El sueldo mínimo son aproximadamente 280 dólares y uno podía resolver con eso, pero ahorita el dólar pasó de 3,50 a 4,00 y me siento muy mal porque la economía después de las elecciones se disparó”.
¿Volver a emigrar es una opción?
María Eugenia Colmenares llegó con su hija a Perú en abril de 2018 y al día de hoy considera que es incierto si se quedará en el país. “Me he topado con peruanos que nos ayudaron mucho porque emigrar con niños no es fácil porque los abusos contra ellos y los femicidios son muy fuertes y por eso llegué a una zona un poco más costosa. Pero no le diría a una persona que emigrara a Perú, no es una opción en este momento. No tenemos beneficios de casi nada y mi experiencia no ha sido grata y en cuanto a progresar tampoco”, expresa.
Sin embargo, afirma que volver a emigrar “es muy problemático para uno, el venezolano, el pasaporte nuevo aquí cuesta 280 dólares y la prórroga 180 dólares”.
A la dificultad de la exigencia de documentos de visas y demás requisitos para entrar a cualquier país se le suma el costo en un momento de pandemia.
“Lo poco que uno podía tener reunido se fue con la cuarentena por la COVID-19. Ahí se fue todo”, expresa Colmenares.
A pesar de ello, volver a su país natal es la última alternativa. “Regresarme a Venezuela no es la mejor opción, aunque he pensado enviar a mi hija y emigrar yo sola, pero los documentos son el mayor problema”, dice.
Frente al panorama, Colmenares aún no sabe si se quedará en Perú o si volverá a emigrar y señala que después de un año con este nuevo mandato lo sabrá.
Por su parte, Carolina Estrada acota que irse de Perú ha estado en las conversaciones con su familia. “Hemos pensado emigrar, salimos huyendo de algo tan horrible como es el socialismo en nuestro país y no vamos a vivirlo aquí. Esperaremos un tiempo prudencial para decidir seguir o quedarnos”, advierte.
Toribio, quien se fue de Venezuela con el plan de generar capital en Perú que le permitiera ayudar a su familia y luego retornar con suficiente dinero para adquirir una casa propia y abrir un negocio, ve esta posibilidad cada vez más difícil.
“Y definitivamente, mis planes de emigrar forman parte de mis opciones actualmente. Teniendo en cuenta la situación y de que será un proceso que tomará al menos un año, pienso usarlo para terminar de analizar la situación y luego seguramente emigre hacia otro país”, afirma el ingeniero informático que ha visto planes para ejercer profesionalmente.
Toribio señala que permanecer en Perú, será cuestión de que en lo económico se mantengan las políticas o de realizar cambios que sean para bien y hacia el libre mercado. “Pero recalco, lo dudo enormemente”, afirma.