La detención del empresario Alex Saab por sus vínculos presuntamente irregulares con el gobierno de Nicolás Maduro dio a conocer a Cabo Verde en todo el mundo, y la notoriedad por este caso es de tal magnitud que su presidente, Jorge Carlos Fonseca, declaró: No recuerdo haber recibido tantas llamadas de jefes de Estado.
El funcionario evadió hablar sobre la extradición de Saab, solicitada por Estados Unidos, porque se trata de una materia que compete al Poder Judicial. En cierta manera, las palabras de Fonseca fueron interpretadas como una lección de respeto al equilibrio de poderes públicos que debe existir en una nación democrática y que debería ser tomada en cuenta por mandatarios que incurren en injerencia o intromisión de los procesos y decisiones judiciales.
Cabo Verde es un archipiélago de 10 islas en pleno océano Atlántico, justo frente a la costa de África occidental. No es desconocido en Portugal porque fue una de sus colonias hasta el 5 de julio de 1975, día que marca como la fecha de su Independencia. Tampoco para Brasil, toda vez que estas islas eran escala de los buques que hacían la ruta desde Lisboa hasta Río de Janeiro o Salvador de Bahía. Ambos países siguen teniendo influencia económica y cultural.
La fama mundial de Cabo Verde, sin embargo, no está vinculada a un héroe de independencia, de la liberación de la esclavitud o a una figura reivindicadora de derechos civiles como pasa en la mayoría de los países africanos, sino que se le debe a una mujer cantante: Cesaria Évora, conocida como la diva de los pies descalzos.
Nació en Mindelo, la capital de la isla de San Vicente en agosto de 1941. Desde muy joven fue una de las intérpretes de la morna, el género musical que distingue a Cabo Verde, pero fue solo en 1988 cuando se dio a conocer en el exterior con sendas presentaciones en Lisboa y París.
En 1992 lanzó el álbum Miss Perfumado, que incluyó una de sus canciones más conocidas como es Sodade, una variación caboverdiana de la palabra portuguesa saudade, que traduce literalmente nostalgia, pero con implicaciones sentimentales más profundas. Llegó a vender más de 300.000 copias.
Posteriormente, en 1995 el músico Goran Breogovic la invitó a participar en la banda sonora de la película Underground, del cineasta Emir Kustúrica, y más adelante compartió con los músicos cubanos de Buena Vista Social Club cantando ese clásico bolero de Nelson Matamoros llamado Lágrimas Negras.
En el año 2003 fue distinguida con un premio Grammy al género de World Music por su álbum Voz DAmor, y una de sus últimas presentaciones -antes de su retiro en 2010- fue en el Teatro Teresa Carreño de Caracas. Falleció en su Mindelo natal el 23 de septiembre de 2011.
El aeropuerto internacional de la isla de San Vicente lleva su nombre, a la salida del terminal está una estatua que la recuerda. Son centenas las mujeres y hombres de Cabo Verde que siguen su legado musical. En el inmueble donde vivió o en el antiguo Palacio de Gobierno de Mindelo, convertido en la Casa del Pueblo, siempre hay quien afirma : Cabo Verde es Cesaria Évora.
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