Se esperaba que los Mets de Nueva York fueran uno de los equipos más agresivos en el mercado durante la actual temporada muerta de las Grandes Ligas. Desde comienzos de año, los de Queens se han movido con fuerza en el mercado en busca de reforzar sus filas y construir un equipo que los pueda poner de vuelta en los playoffs y –por qué no– darles una Serie Mundial.
De cara a la temporada 2021, los metropolitanos cerraron las contrataciones de los lanzadores Marcus Stroman, Taijuan Walker y Trevor May, así como la del receptor James McCann. Además, incorporaron vía cambio al campocorto puertorriqueño Francisco Lindor y al lanzador venezolano Carlos Carrasco, ambos provenientes de Cleveland.
Asimismo, en el mercado de mitad de temporada, adquirieron al torpedero –también boricua– Javier Báez, en un cambio con los Cachorros de Chicago.
Sin embargo, a pesar de los esfuerzos de la gerencia, el equipo cerró su participación en la temporada a 11.5 juegos del primer lugar de su división.
Tres pájaros de un tiro
Ante la frustración por los malos resultados de 2021, el equipo se mostró agresivo desde el primer momento de la temporada muerta. Aunque vieron cómo se les escapaba el valioso brazo de Noah Syndergaard, quien optó por la agencia libre y acordó con los Angelinos de Los Ángeles, los neoyorquinos no se amilanan y siguieron tanteando las opciones.
Los de Queens se llevaron al que probablemente era el jardinero más atractivo de la agencia libre. Starling Marte jugará en el Citi Field por los próximos cuatro años, a cambio de 78 millones de dólares.
Marte viene de un gran año, en el que ligó para .310 de promedio, conectó 12 cuadrangulares, empujó 55 carreras y anotó 89. Además, también sonó 27 dobles, se robó 47 bases y su porcentaje de embasado fue de .383. El dominicano dividió su tiempo de juego entre los Marlins de Miami y los Atléticos de Oakland.
Otra importante pieza de la agencia libre era Mark Canha, quien puede jugar en los tres puestos del outfield y en la primera base. El ex de los Atléticos recibió un acuerdo de 26,5 millones de dólares por dos años.
Canha anotó 93 carreras, remolcó otras 61 y se fue para la calle en 17 oportunidades. Aunque su promedio fue de .231, el porcentaje de embasado que dejó fue de .358.
Los metropolitanos también se quedaron con el polivalente Eduardo Escobar. El maracayero puede jugar en todas las posiciones del cuadro, aunque también tiene algo de experiencia defendiendo los jardines.
‘El de La Pica’ viene de un buen año, en el que defendió los colores de los Cascabeles de Arizona y los Cerveceros de Milwaukee. Conectó 28 vuelacercas y remolcó 90 rayitas para la causa de sus equipos. Además, también conectó 26 dobles y anotó en 77 oportunidades.
Un golpe de Grandes Ligas
Aunque las primeras tres incorporaciones son de un altísimo nivel para los Mets, su golpe maestro y donde fueron más agresivos fue para conseguir los servicios del estelar abridor Max Scherzer, a quien blindaron con un acuerdo histórico de 130 millones de dólares y tres años.
El derecho percibirá un ingreso por temporada de 43,3 millones de dólares, superando ampliamente la marca anterior, también en manos de un lanzador, que pertenecía a Gerrit Cole (36 millones), con los Yankees de Nueva York.
Scherzer es uno de los lanzadores más dominantes de la actualidad, por algo tiene en su haber tres premios Cy Young que lo distinguen como el mejor pitcher del año en su liga. En 2021, el veterano lanzó en un altísimo nivel para los Nacionales de Washington y los Dodgers de Los Ángeles, lo que lo hizo ser uno de los tres finalistas a llevarse el premio este año.
El derecho tuvo foja de 15 lauros y cuatro reveses, en 30 aperturas. Trabajó por espacio de 179.1 entradas en las que dejó efectividad de 2.46. Además, su whip fue el mejor de todas Las Mayores, con un 0.86 descomunal.
Sin embargo, esto no quita que el acuerdo tenga un alto riesgo, considerando la edad de Scherzer, que ya cuenta con 37 calendarios en su haber. Eso sin contar que esto marca un antes y un después en el mercado, pues la cifra condicionará las negociaciones por venir.
De lo que no cabe ninguna duda es que los de Queens quieren ganar –sí o sí– y están trabajando para ello. De hecho, estarían detrás de volver a cerrar las contrataciones de Stroman y Báez que se decantaron por probar su suerte en la agencia libre.