Sin vida y con un disparo en la sien fue conseguido en su oficina el cantante y empresario Alberto Kauam, la noche del lunes 11 de mayo, en la Torre Phelps, en Plaza Venezuela, en Caracas.
Según versiones de los vecinos, Kauam llegó a ese lugar sobre las 5 de la tarde y se encerró en la oficina. Al poco tiempo se escuchó un disparo. Cuando abrieron, encontraron el cuerpo sin vida en el baño. Familiares llegaron hasta el sitio al igual que las autoridades policiales, quienes encontraron un arma de fuego.
Actualmente se investiga las circunstancias en las que se produjo la muerte del cantante.
Alberto K, como se le conocía en el mundo del espectáculo, comenzó su carrera como cantante en los 80, con el tema «Soy un Drácula don Juan», con el que llegó a varios países de Latinoamérica.
Luego de ese boom, trató de hacer otros proyectos sin la misma suerte. En los 90 se convirtió, junto con el dueño de la cadena Pepeganga, en el gerente del sello PPM Records, con el que apoyaron a talento emergente. Con la crisis de la industria musical, decidió dedicarse a la actividad aduanal y se mudó a Miami.
A medios de los años 2000 volvió a aparecer como manager de Hany Kahuam, a quien catapultó como una estrella. Sin embargo, el final de la relación fue amarga, ya que ambos terminaron en una disputa judicial que duró años y que, finalmente, terminó a favor del empresario.
Desde hace dos años se había dedicado a manejar la carrera de su esposa, Aisha Stambouli, con quien tendría su segundo hijo (el primero de la pareja) a finales de este mes.
El lunes por la mañana informó en su cuenta de Twitter que estaría detrás de la segunda temporada, ahora en la web, de la serie «¡Qué clase de amor», de Benjamín Cohén, para la que estaban haciendo castings en Valencia