El pasado domingo 22 de octubre se realizó en Venezuela y otras 80 ciudades del mundo el proceso autogestionado de la primaria, elección en la que la oposición escogió una candidatura unitaria para que la represente en los comicios presidenciales de 2024.
Tal y como lo revelaban las encuestas, la abanderada de Vente Venezuela, María Corina Machado, resultó victoriosa en esta contienda, donde se medía con otros nueve candidatos.
Sin contar que su victoria fue numéricamente aplastante frente a su rival más cercano, Carlos Prosperi, el escogido por Acción Democrática.
Con 64,88 % de actas totalizadas, lo que representa 3.331 actas y 1.591.504 votos escrutados, el segundo boletín de la Comisión Nacional de Primaria, emitido la noche de este lunes, 23 de octubre, mantiene a la cabeza a con más del 90%. Obtuvo un total de 1.473.105 votos, lo que representa 92,56%.
No obstante, sus posiciones -calificadas por algunos como radicales- han puesto a María Corina en el ojo de la opinión pública en repetidas ocasiones. Incluso, algunos expertos aseguran que la “sed de cambio” de los venezolanos” fue lo que la empujó a ganar la primaria.
María Corina Machado, actualmente, se encuentra inhabilitada administrativamente para ejercer cargos de elección popular, lo que parece no haber amilanado el voto a su favor, pero que podría poner en peligro a la oposición en el futuro, por lo que es hoy un tema de análisis y discusión entre los distintos factores.
Ante estas interrogantes, HispanoPost entrevistó a Alejandro Vivas, consultor político, para analizar la situación a la que se enfrenta el sector que adversa a Nicolás Maduro, luego de la victoria y designación de María Corina Machado como la candidata unitaria.
- –¿Qué implica la victoria de María Corina Machado de cara a las presidenciales?
-Ella ganó un proceso primario por parte de un importante sector de la oposición. Creo que es importante rescatar de esta jornada la disposición de la gente a votar. La disposición de la gente de buscar una salida y un cambio a través de la vía electoral y no a través de otros mecanismos.
Lo segundo que es importante destacar es que, aunque ganó por un sector importante de la oposición, no son todos aquellos factores que de una u otra forma se oponen al régimen de Nicolás Maduro. Y con esto no estoy hablando de algunos que están cooptados por el gobierno, sino de muchos liderazgos y organizaciones que, no estando cooptados por el gobierno, no están de alguna manera activados o militando en la Plataforma Unitaria, que fue quien organizó esta primaria.
De tal manera que queda una tarea pendiente muy importante después del domingo, que es cómo logramos una unidad que vaya más allá de los partidos o las organizaciones representadas en la Plataforma Unitaria, en este caso Vente Venezuela.
- –¿Qué hacer ante ello? ¿Cómo manejar las expectativas de los electores y los que votaron por ella?
-El manejo de las expectativas es importante, porque desde siempre se fue muy claro que se estaba eligiendo una candidatura y un liderazgo para enfrentar a Nicolás Maduro en el año 2024. Sobre si esto significa un nuevo liderazgo para la oposición o no creo que es prematuro decirlo porque muchos liderazgos de la oposición y del G4 no estuvieron dentro de la contienda.
Pero, más allá de eso, las expectativas hay que manejarlas porque estamos frente a una dictadura… Gracias a ese proceso de negociación es que pudo hacerse esta elección primaria. Fue uno de los compromisos que se adquirió entre las partes.
El destino de los inhabilitados, en este caso, el de María Corina y el de los otros inhabilitados, no está del todo claro. Es decir, hay probabilidades de que, finalmente, María Corina no sea habilitada y que no pueda ser la candidata. Ahí es donde las expectativas tienen que ser manejadas de una manera racional. Y es que, independientemente de que pueda o no ser la candidata, le toca a ella y a todo el liderazgo político buscar una alternativa para poder enfrentar a Nicolás Maduro en 2024.
A ella, en particular, le toca una responsabilidad muy grande en ese proceso político que, repito, no es exclusividad de ella, sino que ella formará parte de ese proceso que escogerá al nuevo candidato y ella tendrá un peso importante en cómo se lleve ese proceso adelante, en el caso de que se tenga que hacer.
No para seleccionar exclusivamente a la persona que vaya a enfrentar a Maduro, sino cómo ella facilita y cómo ella ejerce un liderazgo positivo y un liderazgo facilitador para que, entre todas las fuerzas políticas y las fuerzas vivas de Venezuela, se pueda escoger un sustituto.
En el caso que ella pueda ser candidata y esté habilitada, como lo han dicho todos los liderazgos de la oposición, no solo la acompañarán, sino que la acompañarán activamente.
- –¿Este resultado indica que la sociedad, hoy en día, no solo está más que harta sino más radical también?
-El resultado por sí solo no indica una radicalidad, a pesar de que María Corina siempre ha manifestado sus ideas, que están a un extremo de su espectro y siempre ha manifestado su visión de cómo es la teoría de cambio para Venezuela, que es a través de la fuerza, a través del quiebre y de la intervención de la fuerza extranjera, a pesar de eso hoy en día el mandato que se le da es a través del voto.
Creo que ella debe entender que el mandato que se le da es a través del voto y no a través de otro tipo de salida o de teoría de cambio. Recordemos también que todavía se están contando los votos, pero si llegase a ser el 10% de la población, es un porcentaje importante. Pero recordemos que los factores y venezolanos que aseguran estar en contra del régimen son mucho más de 10%. Según algunas encuestas, puede llegar a 75%u 80%.
Es decir, lo que se expresó fue una parte importante, pero estamos hablando de 10% versus 70% u 80% que adversa a Maduro. Esto no quiere decir que el país cambió o que el país es menos o más radical, sencillamente es un mandato de un grupo de la población para que lleve adelante un liderazgo y una misión, que es enfrentar a Nicolás Maduro en 2024, pero recordando siempre que es a través del voto.
- –¿Cómo se manejaría la inhabilitación de María Corina?
-La conflictividad, si persiste la inhabilitación, creo que ella tiene una responsabilidad importante, pero no la exclusividad. Tenemos que separar responsabilidad de exclusividad. Para derrotar a Maduros se necesita el concurso y la unión de unos factores que van muchísimo más allá de los que participaron el domingo y muchísimo más allá del liderazgo de ella.
Ella debe saber leer e interpretar ese mandato que se le dio. Ella tendría que ser capaz de ayudar y facilitar ese proceso que, como dije, no es exclusivo de ella, sino donde participarán distintos liderazgos y fuerzas políticas y sectores, no necesariamente políticos, que hacen vida en el país.
Cualquier cosa distinta sería meter al país por las rutas que ya sabemos fracasadas, por las rutas que ya sabemos que no han funcionado, pero peor que eso sería perder una gran oportunidad en el año 2024 de un cambio político y regalarle a Nicolás Maduro seis años más, con todo lo que eso significa.
- –¿Cómo será esa alianza Voluntad Popular y María Corina Machado, a partir de ahora? ¿Habrá una nueva versión de “la salida“?
-Sabemos los planteamientos de Voluntad Popular, sobre todo a través de Leopoldo López, y esta era una alianza natural que tenía que darse, pero en Venezuela, no porque ellos no lo quieran, y los venezolanos están absolutamente claros que ese camino de “la salida” de 2014 no es el que quieren recorrer en este momento.
- –¿Esto acaba con las negociaciones y los negociadores?
-Ella ha expresado en distintas ocasiones, sobre todo antes de que se firmara el acuerdo de Barbados que ella iba, de alguna manera, a afrontar un proceso de reingeniería de ese proceso de México y dijo en muchas oportunidades que incluso llegaría al fondo, por ejemplo, de replantear los objetivos, modificar la delegación, entre otros, pero eso fue antes de que se firmara el acuerdo.
Por el bien del país, no solo los firmantes del acuerdo, sino quienes verdaderamente están siendo los garantes de este acuerdo, que es el gobierno de Estados Unidos, no estarían dispuestos a resetear como ella ha planteado en otras ocasiones. Ella es parte de este acuerdo. A ella se le ha informado permanentemente, ella misma lo ha comentado sobre todo en la entrevista con Carla Angola, ella ha estado al tanto de todos los pasos que estaba dando la delegación y se informaba a través del jefe de esa delegación que es Gerardo Blyde.
De tal manera que esas declaraciones que ofreció antes de que se firmara el acuerdo y esta situación de la que ella fue informada y estuvo de acuerdo.
- –¿Volverán las sanciones si no se levantan las inhabilitaciones políticas?
-Las partes lo han dicho. No es que se eliminaron las sanciones, sino que hay unas licencias y tienen una vigencia de seis meses y se volverá a evaluar la situación.
- –¿Qué pasa con la Asamblea Nacional 2015?
-No tengo la versión oficial de qué fue lo que se habló con respecto a este tema en el proceso de negociación. Pero pudiera desde el análisis, más no desde la certeza de los hechos, decir que todo lo que se firmó y lo que tiene que ver con la licencia para el manejo y la transacción de los bonos y todas esas cosas, la Asamblea Nacional de 2015 pasará cada vez a tener menos relevancia y menos razón de existir.