El presidente del Instituto Venezolano de la Leche y la Carne (Invelecar), Carlos Albornoz, afirmó que hace unos cuatro años atrás el consumo de carne ovina (carne roja) fue de entre 3 y 4 kilos por persona al año. Sin embargo, desde 2020 ha habido una recuperación, ya que en 2021 se consumió 6 kilos de carne por persona y en 2022 está en aproximadamente 8 kilogramos.
Explicó que actualmente el consumo tanto de leche y carne en Venezuela es el más bajo de Sudamérica; no obstante, años atrás se llegó a consumir en el país 24 kilos de carne ovina por persona al año. “El país tenía un promedio histórico de consumo de carne ovina de unos 16 o 18 kilogramos por habitante al año, pero bajamos y llegamos a consumir hasta 3 kilogramos por habitante al año. Es decir, la sexta parte de nuestro promedio histórico y la octava parte de los máximos de consumo que llegamos a alcanzar en 1989 y 1990, que era de 24 kilos y cerca de los promedios de 2012”, dijo.
En este sentido, enfatizó que a medida que la economía venezolana se fue estabilizando, se dolarizó, empezó a descender la inflación y el salario fue recuperando terrenos; sobre todo en el sector privado, hubo un mayor consumo por parte de los venezolanos.
“Ese salario ha hecho que se componga un poco el consumo del venezolano, al consumir un poco más de huevos, quesos duro, pollos y carne bovina en cuarto lugar, ya que ese es el ranking del consumo de proteínas del venezolano”, expresó.
Destacó que para los años 2017, 2018 y 2019 el consumo fue muy bajo. “Desde 2020 hay una leve recuperación del consumo, tanto que en 2021 pasamos de consumir aproximadamente 3 o 4 kilos de carne ovina, a unos 6 kilos para el año pasado y este 2022 estamos entre 6 y 8 kilogramos”, reiteró.
Por otro lado, señaló que el consumo de leche actualmente es de unos 65 o 68 litros por habitante al año aproximadamente, lo que hace que sigan siendo niveles por debajo de lo que se consume en Sudamérica.
«Cuando hay menos ofertas forrajeras, tenemos menos leche y el precio del queso aumenta. A partir de diciembre-enero siempre se ha observado un histórico aumento del precio del queso y de la leche en Venezuela desde los últimos 15 a 20 años. Pero hay que tomar en cuenta que hoy en día el procesamiento de leche de la industria formal ha disminuido mucho y ocupa entre 12% y 15% de lo que es el mercado de la producción de leche nacional. Mientras que el gran protagonista del consumo de leche actualmente es el queso duro de rallar”, expresó.
Asimismo, explicó que el queso duro ha logrado tomar gran parte del mercado, al sustituir la leche en polvo y la leche líquida que se vendía en envase de cartón, lo cual obedece a lo que viene dándose en los últimos 20 años en cuanto a los cambios en los hábitos de consumo de los venezolanos.
“El queso es un alimento que se puede dar en la pasta, con la arepa y tiene un sabor salado, es apetecible y sobre todo, rinde mucho. Dadas las circunstancias económicas del consumidor el venezolano ha encontrado en el queso de rayar un producto verdaderamente apetecible”, agregó.
El mercado de exportación de reses en 2022 es «nulo»
Carlos Albornoz afirmó que entre 2020 y 2021 más de 200.000 reses salieron vía exportación- “Hubo algunos nichos de mercado que se crearon con una rentabilidad muy baja que se le daba al productor, como algunos mercados en el Medio Oriente. Estos mercados en el año 2022 prácticamente han sido nulos. Sin embargo, hemos visto como una pequeña recuperación a los precios al productor primario, que pasó de 1 dólar a ganar 1,5 dólares el kilo de carne, dependiendo del tipo de animal”.
En cuanto a la producción, advirtió que esta no ha variado mucho, ya que en Venezuela hay un rebaño que está por el orden de 10 millones a 11 millones 200 mil reses.
Agregó que Colombia es un «gran marcador del precio» del ganado venezolano, por el contrabando de reses Venezuela hacia el vecino país por el diferencial de . «Cuando el animal costaba en Venezuela 1 dólar y en Colombia estaba en 2 dólares. La diferencia era enorme y no había la posibilidad prácticamente de evitar el contrabando”.
En este contexto, informó que el contrabando de Venezuela a Colombia ha disminuido considerablemente. “Hoy la diferencia de precio del ganado colombiano al venezolano no es más de 20% y los animales que se están beneficiand se consumen en cada uno de los países”, dijo.
Ha habido una pequeña recuperación gracias a la dolarización
Albornoz enfatizó que en los últimos dos o tres años ha habido una pequeña recuperación, ya que se ha dolarizado la forma en que se comercializa el producto primario, el ganado a puerta de corral.
“Eso ha hecho que estabilice un poco la cadena y vemos que no existen esos grandes saltos que existieron en el año 2017, cunado costaba tantos bolívares una cosa y luego a los días cambiaban. Sin duda, la dolarización ha dado una estabilización al mercado”, opinó.
Por otro lado, comentó que el financiamiento de para producción de ambos rubros no existe. “La cartera de créditos de Venezuela no supera los 500 millones de dólares en todos los sectores. El sector pecuario desde hace más de 7 años prácticamente está anulado en cuanto al tema de financiamiento, todo se está sosteniendo por autogestión y autofinanciamiento de parte no solo del sector pecuario, sino también del sector agrícola y por eso es que es cuesta tener avances importantes».
Aseveró que hace mucha falta inversión extranjera de países que sean grandes productores y también de instituciones como el Fondo Monetario o cualquier ente multilateral en donde pueda Venezuela acceder a créditos internacionales y que sean invertidos en el agro. “Eso sería no solo necesario sino fabulosos”, apuntó.
Por último, mencionó que desde el Instituto Venezolano de la Leche y la Carne no proyectan una recuperación relevante en ambos rubros para el final del año. “No se puede hablar de crecimiento, porque nosotros estamos muy por debajo de los estándares histórico de promedios en producción, consumo, en todos los ítems de revisión de todo lo que son las estadísticas del sector agropecuario. Aunque ha habido pequeñas recuperaciones, hablar de que vamos a tener un crecimiento absolutamente utópico”, puntualizó.