Sberbank, el mayor banco de Rusia y controlado por el Estado, decidió abandonar el mercado europeo ante el impacto en sus filiales en el Viejo Continente de las sanciones occidentales por la invasión rusa de Ucrania y tras advertir el Banco Central Europeo (BCE) de su posible quiebra.
«En el entorno actual, Sberbank ha decidido retirarse del mercado europeo. Las subsidiarias del grupo se enfrentan a una salida anormal de fondos y a una amenaza para la seguridad de los empleados y las sucursales», indicó en un comunicado Sberbank, objeto de las sanciones occidentales.
El banco explicó que, por orden del Banco Central de Rusia, no podrá suministrar liquidez a los bancos filiales europeos, que, sin embargo, tienen un alto nivel de capital y calidad de activos, y los depósitos de los clientes están asegurados de acuerdo con la legislación comunitaria.
«Los activos del banco son suficientes para hacer pagos a todos los depositantes», indicó el documento.
Al cierre de 2021, el banco contaba con 13.600 millones de euros en activos.
Fuente: EFE