El presidente de la Cámara Inmobiliaria de Venezuela, Francisco López Domínguez, aseguró que existen posibilidades de crecimiento del sector inmobiliario en Venezuela, donde lo que más prevalece son los alquileres.
Del 25% de crecimiento que tuvo el sector en 2020, 70% se debió a alquileres: “Esto se debe a que, por un lado, el sector de compra y venta está perjudicado, porque no hay financiamiento, porque, según la ley, mal llamada estafas inmobiliarias del año 2009, no se permiten las preventas. Es decir, no se puede entregar 10% o 20% de la compra mientras el comprador consigue el remanente, mientras vende su activo”.
Indicó que este es el único país de occidente donde se tiene que entregar el 100% del dinero, “lo cual es un problema porque el patrimonio de la ciudadanía está conformado por su vivienda y quizás algunos ahorros y activos o un préstamo. Pero la única manera de tener un activo líquido para comprar una casa es vender la otra casa y esto hace que sean muy engorrosas las compra-ventas”, señaló.
Otro causa, explicó, es que el sector primario, que es la construcción nueva, está “totalmente deprimido”. Sostuvo que “tenemos 10 años prácticamente paralizados, no hay construcción nueva por varios motivos, el más importante es el mercado secundario, que ha bajado tanto de precio que hoy en día una obra nueva cuesta más que comprar un apartamento construido”, lo cual no sería negocio para nadie, apuntó.
Agregó que tampoco hay financiamiento, otro factor que mantiene detenido al sector primario. “En cambio en el sector secundario (alquiler y compra-venta) sí se pudiese decir que hay una tímida recuperación”, reiteró.
López Domínguez dijo que “hasta el año 2018 veníamos decreciendo, luego hubo un cambio de tendencia, se paralizó el decrecimiento: en 2019 crecimos 5%, en 2020 lo hicimos 9% y la estimación es que en 2021 crezcamos aún más en cuanto a precios promedio del país”.
Asimismo, celebró que haya cambiado la tendencia del sector inmobiliario en Venezuela. “Es un sector que en otros países como Inglaterra aumentó 300%, en Brasil hubo un récord histórico de aumento, al igual que algunas ciudades de Estados Unidos; y que nosotros tengamos un crecimiento de 9%, es tímido, pero para la situación del país es extremadamente bueno”, aseveró.
Aseguró que “si pudiésemos incentivar el financiamiento, nos daríamos cuenta que esa gente que está pagando las cuotas en alquileres pudiesen pagarlo como cuotas a un banco o a una entidad financiera y ser propietarios”.
“Yo creo que ahí está nuestra labor como sector, incentivar ese mercado de valores para que definitivamente podamos enfrentar el financiamiento y se puedan recuperar los precios. Si se diera eso los precios secundarios se mejorarían e inmediatamente el mercado primario pudiese entrar en escena, lo cual además generaría puestos de trabajos y riquezas en el país”, advirtió.
Apuntó que para poder incentivar el mercado inmobiliario hay que hacer algunos cambios. “Nos gustaría cambiar las leyes o hacer algunos ajustes para generar la confianza suficiente y poder incentivar a la población para generar cierto bienestar a quienes conforman nuestro sector”, dijo.
Agregó que “necesitamos hacer posible que, por lo menos, nuestro sector se reactive, para lograr un cambio económico en el país y así generar un cambio político y no seguir con el tema de que debemos generar un cambio político para que luego se genere el cambio económico”.