La agencia de salud de Canadá cambió sus pautas sobre la mezcla de dosis de vacunas contra la COVID-19, al permitir que sus habitantes puedan recibir un tipo diferente de vacuna en su segunda inyección, con relación a la primera.
En la Declaración de la Comisión Asesora Nacional sobre Inmunización de Canadá (NACI) se estipula que además de poder combinar las vacunas de AstraZeneca/Oxford y las de Pfizer/BioNTech, las dosis de Pfizer y Moderna son intercambiables. Es decir, se puede empezar con una y terminar con otra.
Indican que para ser mezcladas, las vacunas deben contar con las mismas recomendaciones e intervalos de administración, contener tipos comparables de antígeno, y términos de seguridad, reactogenicidad, inmunogenicidad y eficacia similares.
«Intente encontrar la misma vacuna, la misma de ARNm, pero si no puede, por alguna razón, considerelas intercambiables», dijo en una rueda de prensa la doctora Theresa Tam, directora de salud pública de Canadá.
La razón de esta medida se debe a que Canadá, país que cada día vacuna a casi 1% de su población, actualmente tiene problemas con el suministro de dosis de Moderna y AstraZeneca.
Según datos oficiales, hasta la última semana de mayo, 13 millones de canadienses recibieron al menos una dosis de la vacuna Pfizer, mientras que 3,5 millones obtuvieron la vacuna Moderna y casi 2 millones, la AstraZeneca.
En el documento de la comisión también se señala que vacunas similares de diferentes fabricantes se utilizan habitualmente de forma intercambiable, en particular durante las transiciones entre programas de salud pública a lo largo del tiempo y cuando cambia el suministro. Y cita como ejemplo vacunas para la hepatitis A, hepatitis B, influenza, sarampión, paperas, rubéola, vacunas conjugadas contra el meningococo, tétanos, etc.
El doctor Elmer Huerta profundiza sobre la combinación de vacunas de distintos laboratorios en CNN. Puedes leer sus impresiones aquí.
Con información de CNN