El plan es imponer un mundo multipolar que atenta contra la sociedad Occidental, los logros en la defensa de los derechos humanos, entre ellos la democracia y la libertad, señaló el experto y profesor universitario, Elie Habalian.
China ató a Venezuela con 450 convenios, suscritos en los últimos 10 años. Rusia ofrece armas, adiestramiento y envía soldados a Caracas para intimidar a los países de América Latina y enviar un mensaje a Estados Unidos.
China, Rusia, Irán y Turquía son partidarios de mantener un bloque totalitario, tanto en Cuba, como en Venezuela. Lo hacen porque sus valores son otros, no son los ideales de libertad y democracia, alertó el ex gobernador de Venezuela en la Organización de Países Exportadores de Petróleo (OPEP), Elie Habalian, y experto en temas de la región y del medio oriente.
Habalian expone en la III entrega de la serie Lo que esconden los acuerdos estratégicos, una lectura sobre las amenazas a la seguridad de América Latina y Estados Unidos, la presencia de militares y la compra de equipos bélicos por parte del chavismo.
China y Rusia no tienen bases militares en Venezuela, pero se baypasean la Doctrina Monroe, advirtió el también profesor universitario, con 30 años de estudio al complejo escenario mundial, y graduado de ingeniería mecánica en la Universidad de Carabobo.
La doctrina norteamericana data de 1823 y fue ideada por John Quincy. Sin embargo, quien la presentó al Congreso fue el presidente Jaime Monroe en su sexto discurso a la nación, por lo que se le bautizó con su apellido.
La Doctrina Monroe acuña la expresión América para los americanos como una fórmula para evitar que Europa prosiguiera con la apropiación de territorio. El sistema político de las potencias aliadas es esencialmente distinto ( ) del de América ( ) Cualquier tentativa de ellas para extender su sistema a cualquier porción de nuestro hemisferio sería considerada por nosotros como peligrosa para nuestra paz y seguridad, indica el manifiesto. (Fuente: https://www.caracteristicas.co/doctrina-monroe/#ixzz5ogLtky6x).
Habalian observa que la amenaza se cierne sobre el territorio americano.
China, por ejemplo, a pesar de que su respaldo es opaco, se las arregla para avalar a Maduro en Miraflores. En la ONU votó a favor del régimen. En cambio, Rusia expresa su apoyo de frente. Turquía lo hace porque se insertó en la estrategia anti-norteamericana y consiguió que Maduro le vendiera el oro que necesitaba para darle soporte a su moneda. La injerencia de esos países partió de los planes del Foro de Sao Paulo para tratar de desplazar a Estados Unidos de América Latina y de conseguir gobiernos de izquierda, a los cuales poco les valen la libertad y los derechos humanos. Una muestra es que ahora se movieron y consiguieron crear el Grupo de Contacto con México, Uruguay, Francia, Portugal y Noruega, que es aliada de Cuba.
¿Por qué razones China, Rusia e Irán optaron por tener el control del régimen chavista en Venezuela?
Por razones políticas, ideológicas y estratégicas frente a los Estados Unidos. Desde 2001, Hugo Chávez planeó darle espacios a sus aliados y, para ello, utilizó los órganos del Estado que cambiaron leyes, crearon oficinas de enlace. A través de la Habilitante modificó la Ley de Hidrocarburos para crear PetroCaribe y así tener la venia de las islas cercanas. Luego entabló una alianza con Fidel Castro que implicó, entre otras, la disolución del Congreso y la eliminación de cualquier traba a su maniobra de abrirle pasos a sus aliados. PetroCaribe fue el primer acto geopolítico de carácter gubernamental con ese fin y que permitió, no solo llevar petróleo a precios subsidiados, sino que otros países participaran en la vida económica del país. China vio una oportunidad para invertir parte de sus recursos, pero para mantenerse como aliado a Chávez para proyectarse en América Latina, como lo hicieron en África y en su área de influencia, en el Asia, dijo.
¿Buscaron mercados?
En América Latina, los chinos tienen inversiones en Perú, Ecuador, Argentina, Paraguay y México, entre otros, pero en Venezuela colocaron equipos militares, así como maquinaria agrícola y dieron créditos a Chávez y a Maduro, explicó.
¿La alianza con Rusia qué esconde?
«Los acuerdos con Rusia comenzaron en el orden petrolero. Chávez no pidió permiso al Parlamento para establecer esta alianza, con la cual compró 5 mil misiles tierra-aire. Se apertrechó ante su declaración de ser socialista y como un mensaje a Estados Unidos. Maduro siguió esa predica. Los acuerdos con China y Rusia son secretos, no están autorizados por el Parlamento. Entre 2010 y 2015, la Asamblea Nacional estaba en manos del chavismo así que no se controlaban entre ellos. Se permitieron sin discusión, sin oposición. A partir de 2016, la correlación de fuerzas políticas cambió y el gobierno obvió los mecanismos legislativos bajo el argumento de que se trata de acuerdos en resguardo de la soberanía y de orden confidencial», indicó.
¿Qué implicaciones legales tiene esto?
«Que los acuerdos, convenios o tratados con Rusia y China, suscritos entre 2016 y 2020, no tienen valor legal, no existen para la República porque el Parlamento los desconoce, no le dio permiso al Ejecutivo. China y Rusia saben de estas resoluciones, pero los acuerdos están en ejecución y llegado el momento que se retome la institucionalidad en Venezuela se tomará una decisión», expresó.
¿Es factible que Rusia y China lleguen a tener bases militares en Venezuela?
«Por ahora no hay bases, pero cualquier plan internacional requiere del aval del Parlamento y dada la composición actual del Legislativo eso será rechazado. Hay sí la presencia de militares cubanos, rusos y chinos en las instalaciones militares venezolanas como parte de los acuerdos de cooperación y por razones políticas: de hacer ver que cuentan con el respaldo de esas naciones frente a Estados Unidos. Pasó el 23 de febrero de este año cuando llegaron dos aviones con 99 soldados que, entiendo, ya se marcharon porque vinieron en un avión que funciona con energía nuclear lo que viola los tratados de América Latina», insistió.
No tienen una base, pero cuentan con acceso privilegiado a 5 instalaciones militares en Venezuela distribuidas en igual número de estados.
«Es factible por los acuerdos de formación de pilotos, de manejadores de misiles y equipos en el Ejército, pero no existe una base rusa o china como tal. El gobierno recurre a la propaganda con la presencia de militares de otra nación porque está demostrado que, por ejemplo, la Milicia único cuerpo a disposición de Maduro- que no sirve para enfrentar a una fuerza castrense, no están preparados, ni cuentan con las armas. Además, que las intervenciones modernas no son de orden terrestre sino puntuales, con equipos de alta tecnología. El mundo militar ha avanzado mucho», precisó.
¿Cuál es el plan de China y Rusia en Venezuela?
«La alianza por razones ideológica, política, más allá de aprovechar de vender y colocar sus armas que hagan que los ejércitos de América Latina dependan de sus fábricas, es para imponer lo que llaman el mundo multipolar, que no es otra cosa que ir contra la sociedad civilizada de Occidente, contra los derechos humanos y enfrentar a Estados Unidos, por ser el único país del mundo que ha hecho suya la causa de la humanidad. Ni China, ni Rusia, ni los musulmanes hacen suyo el lema: Libertad, derechos humanos, democracia, ya que abiertamente no los respetan en sus países, menos en los lugares a los que quiere imponer sus doctrinas. En eso coinciden con Pakistán, Arabia Saudita e Irán», explicó.
Ante estas amenazas, ¿Qué hará Estados Unidos: se quedará de brazos cruzados?
«En materia de acuerdos podrán seguir, pero no tendrán bases militares en Venezuela porque esta idea choca con la Doctrina Monroe, no es apoyada por la Asamblea Nacional, ni será bien vista por el resto de los países de América Latina. Por ahora, China y Rusia con la venia de Venezuela se baypasean la Doctrina Monroe; no tienen bases, más si envían soldados, equipos y prometen mantener las ayudas a Maduro. La Doctrina Monroe está vigente y la mejor evidencia es que Cuba no tiene bases militares extranjeras en su territorio, sin embargo, no violan la Doctrina, pero sí la baypasean. Estados Unidos siempre ha defendido y defenderá la existencia de los derechos humanos y tiene sus maneras de actuar», aclaró.
Dadas estas posiciones, ¿cuáles son los escenarios para Venezuela?
«La situación es compleja. Por un lado, la crisis social aumenta cada día, y por el otro existe una corriente muy peligrosa para Venezuela y América Latina: El surgimiento del Neo-totalitarismo o totalitarismo extremo, representado por los Habaneros o Castristas en Cuba que influyen en el régimen; los extremistas nocivos como Tareck El Aisami, Hezbolá e islamitas; y el chavismo light, que lo integran militares, que no son totalitarios, sino seguidores de las ideas de Hugo Chávez, pero cautivados por los habaneros. La posibilidad de una salida pasa por vencer a todas estas corrientes y, lamentablemente, los actos del 30 de abril causaron un bajón en la lucha contra el régimen. La opción, entre otras, es que los chavistas y militares no comprometidos con Cuba, ni Irán, se pongan del lado de la Constitución y demanden la ida, en mejores términos de Maduro y su entorno. Vladimir Padrino López dio una señal al intentar hablar con Estados Unidos. Eso pasa por enfrentar a los radicales, entre ellos El Asami y Tareck William Saab y militares comunistas -que no son muchos- y por organizar la lucha», finalizó Habalian.
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