En el segundo trimestre de este año, la capacidad utilizada de la industria se ubicó en 31%, lo que representa un incremento de 4 puntos porcentuales, con respecto al primer trimestre.
La información la dio a conocer este miércoles el presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), Luigi Pisella, quien presentó los resultados de la más reciente Encuesta de Coyuntura Industrial.
En el estudio participaron industrias pertenecientes a los sectores de alimentos y bebidas, textil y calzado, madera y papel, químico y farmacéutico, caucho y plástico, productos no metálicos, metales y productos del metal, maquinaria y equipos, automotor y autopartes, entre otras.
“Durante el lapso antes citado, la capacidad utilizada de la industria venezolana observó un leve repunte con respecto al primer trimestre del año, situándose en 31% (30,7%, precisa la encuesta), lo que sin duda es el resultado de la mejoría en algunos de los indicadores de la economía nacional en el transcurso del presente año”, comentó.
Pisella resaltó que más del 50% de los consultados opinó, con respecto al pasado año, que la situación económica, tanto del país, así como del sector al cual pertenecen y de la industria que representan, ha mejorado.
“54% de los encuestados cree que el país tiene una mejor situación económica, 51% opina que el sector al que pertenece se encuentra en un escenario positivo y 52% cree que su empresa está mucho mejor con respecto al mismo trimestre del año pasado”, revela la encuesta.
Pisella aclaró que esta percepción viene ligada al aumento en los niveles de producción, traducida en una mayor demanda de los productos e incremento en las ventas. “Aunque ello no se ha visto reflejado en la creación de nuevas fuentes de empleo, sí se ha evidenciado en una mejor remuneración para los quienes laboran en el sector manufacturero, aunque estamos claros que ello no es suficiente”.
Con relación a este punto, indicó que las mejorías que se obtengan como resultado del incremento de la demanda y, por ende, en la producción, se transformarán en “más bienestar para los trabajadores”.
Al ser consultados sobre cómo consideran los industriales que será la situación económica dentro de 12 meses con respecto a la actual, “43% considera que será mejor en el país, 47% opina que será mejor en su sector y 49% asegura que será mejor para su empresa”.
Inversiones operativas y de inventario
El gremialista también hizo mención a las cifras que arrojó la encuesta en cuanto a la inversión hecha por los industriales en este segundo trimestre de 2022.
“En promedio, el 50% de la industria mantuvo la inversión con respecto al mismo trimestre del año pasado; sin embargo, cuando hablamos de la gran empresa podemos observar que 56% tuvo una mayor inversión, 36% aumentó su inversión en la mediana empresa y un número que nos llamó la atención es que 37% de la pequeña empresa aumentó su inversión”, puntualizó.
Sobre el tipo de inversiones, el presidente de Conindustria dijo que 73% de los encuestados realizó inversiones operativas y de inventarios. No obstante, informó que hay un rezago en lo que tiene que ver con maquinarias y tecnología.
Pisella resaltó que 80% de las empresas consultadas tiene planes de realizar inversiones operativas y de inventarios en lo que resta del año, lo que permitiría mantener la recuperación que se viene dando en el sector.
“Hay una pequeña recuperación, pero no es suficiente para seguir aumentando la capacidad de producción, generando nuevos puestos de trabajo y mejorando los sueldos y salarios de los colaboradores”, sentenció.
Otro dato importante del estudio precisa que 64% de los encuestados aumentó sus ventas comparado con el mismo trimestre del año pasado y 75% considera que aumentará sus ventas en lo que resta del año.
Al referirse al promedio de remuneración de los colaboradores, Pisella indicó que la encuesta revela que ”el salario promedio de un obrero en una gran empresa es de 187,73 dólares, mientras que en la mediana empresa es de 131,75 dólares y en la pequeña se ubicó en 113,61 dólares”.
Más de 5 mil millones de dólares para apalancar al sector
Al referirse a los requerimientos de capital que necesita la industria venezolana para hacer frente al esperado incremento en la demanda de productos, Pisella insistió en la necesidad de liberar las limitantes que tiene el sistema financiero nacional en lo referente al encaje legal.
“Las empresas industriales requieren de más de 5 mil millones de dólares, que serán empleados para capital de trabajo, de acuerdo con lo expresado por los participantes en este estudio”, señaló.
La falta de financiamiento, la baja demanda nacional, la voracidad fiscal, el deterioro de los servicios públicos y la competencia con productos importados, continúan siendo los principales factores que limitan la producción en el país, expresó.
Con relación al tema de la voracidad fiscal, el presidente de Conindustria insistió en la necesidad de establecer políticas de armonización tributaria, reiterando el llamado del gremio al Ejecutivo nacional para que se establezcan los lineamientos y políticas públicas necesarias que resuelvan el problema.
Indicó que 53% de la industria se autofinancia, algo que es un factor limitante para el crecimiento de la producción de las industrias.
Cunado se le preguntó sobre el suministro de combustibles, el presidente de Conindustria indicó que todavía sigue siendo problema importante. Sin embargo, no se encuentra entre los primeros cinco factores que impactan a la industria.
“Esta es una variable que cambió porque hemos visto una ligera mejoría en cuanto al suministro de combustible. No está entre los primeros cinco factores que afectan la producción industrial pero si está en el sexto lugar y, por ese motivo, seguimos haciendo un llamado a las autoridades para que nos ayude a resolver esta situación”, indicó.
Aseveró que tienen grandes expectativas con respecto al restablecimiento de las relaciones comerciales con Colombia y advirtió que realizarán todas las propuestas que sean necesarias para lograr un equilibrio entre los sectores privados de ambas naciones.
“Hoy nosotros competiríamos en desventaja con los empresarios colombianos, pero haremos todo lo que sea necesario para colocar reglas claras, lo que permita una relación comercial equilibrada entre los dos países”, concluyó.