Pese a que en 2020 se realizaron nuevas elecciones legislativas, en las cuales fue electo un nuevo grupo de diputados, en su mayoría oficialistas ya que la oposición se negó a participar en dichos comicios, los parlamentarios electos en 2015 siguen cumpliendo cada 5 de enero con la tradición y, a su juicio, “obligatoriedad constitucional”, de elegir una nueva junta directiva.
Por ello, este jueves 5 de enero, como lo establece la Constitución de Venezuela, el Estatuto de Transición y el Reglamento Interior y de Debates de la Asamblea Nacional (Ridan), la presidencia de la Asamblea Nacional pasó a manos de la diputada (electa en 2015) Dinorah Figuera, de Primero Justicia; la cual compartirá la directiva del período legislativo 2023-2024 junto a Marianela Fernández y Auristela Vásquez, en la primera y segunda vicepresidencia, respectivamente.
La propuesta de poner la junta directiva del Parlamento en manos de tres mujeres, representantes de los partidos Primero Justicia, Un Nuevo Tiempo y Acción Democrática, los cuales dispusieron la votación para la disolución del interinato, fue hecha por el diputado (2015) de la tolda blanca, José Trujillo.
De acuerdo con la reforma del Estatuto de que rige la transición, aprobada el pasado 30 de diciembre por la Asamblea Nacional electa en 2015, las competencias de la presidencia encargada que desde el 23 de enero de 2019 encabezaba Juan Guaidó ahora pasan a la directiva del Parlamento.
Sin AN ni interinato
La moción, que fue salvada por una representante de Voluntad Popular, le dio la oportunidad a Juan Guaidó, quien administró el cargo de presidente del Parlamento desde hace cuatro años, para decir que “nuestra lucha, lo hemos dicho, no es por un cargo. Hoy como demócrata estoy presente para ratificar que este juramento tiene una connotación importante: hay que volver a la Constitución, a la legalidad, al Estado de Derecho, a proteger los derechos humanos, defender a los más vulnerables y enfrentar a la dictadura”.
Agregó que la junta directiva electa debe asumir “el compromiso con responsabilidad”: “No podemos generar un autovacío de poder en este momento que solamente beneficiaría a quien hoy es dictador de facto y en ejercicio en Venezuela y atropellando a cada venezolano”.
En su discurso Guaidó aseveró que, tras su salida de la presidencia encargada, por votación mayoritaria del G3 (PJ, VP y UNT), se le dificulta hablar de unidad, pero exigió a quienes lo acompañaron en este cargo durante cuatro años a someterse a la rendición de cuentas de sus actuaciones.
“Hemos sido transparentes de cara a Venezuela. Difícil hablar de unidad, en medio de esta dividida votación y de los debates de días anteriores. Año tras año juré aquí con ustedes construir capacidad para unificar. Hoy no podemos entregarle una a la dictadura. Por eso, la tarea es doble de asumir el reto de unión y de volver a la Constitución”, dijo.
Al final de su intervención, Guaidó agradeció el apoyo de los más de 60 países que acompañaron su gestión desde el gobierno interino y aprovechó para alertar sobre los presuntos riesgos de perder los logros alcanzados con el interinato.
Presidencia online y exiliada
Como ya ha sucedido desde 2021, cuando tras los comicios rechazados por la oposición y los países democráticos que dieron la presidencia de la AN a Jorge Rodríguez, los diputados electos en 2015 decidieron este año seguir jurando sobre la Constitución Nacional como representantes del Parlamento de forma online. Solo que en esta oportunidad la presidencia de la junta “digital” cambió de cara y partido.
Este año, el cargo de la presidencia del Parlamento, el cual recaía desde hace cuatro años en los hombros de Juan Guaidó, es asumido por la justiciera en el exilio Dinorah Figuera, quien migró a España a mediados de 2018 y ha estado ejerciendo su participación política en Venezuela de forma digital, pero en la práctica se conoce que ha estado dedicada a la diáspora.
En una nota de prensa enviada por el equipo de comunicaciones de Primero Justicia, porque hasta el momento se desconoce si habrá encuentros con la prensa por parte de la nueva presidenta, se conoció que la diputada está dispuesta a consolidar la unidad de los venezolanos «para lograr el cambio que requiere el país hacia la democracia a través de unas elecciones libres».
En la misma, explicó que estuvo comprometida con la lucha contra el cáncer, pero su victoria da “testimonio de ser una mujer valiente que trabaja en unidad. Todos los que estamos aquí tenemos que apostarle a la unidad por Venezuela y por la democracia. Todos los diputados somos necesarios, todos los ciudadanos de Venezuela somos necesarios. Esta es una AN que está inscrita en el camino de la negociación de México. La institución de la AN va a construir un camino que apoye todas las medidas necesarias para tener nosotros unas elecciones libres, democráticas, transparentes y creíbles».
Perfil presidencial
Dinorah Figuera durante su intervención no solo reconoció los logros de Guaidó, sino que habló de su humildad, del esfuerzo de haber nacido en Catia, una de las barriadas más peligrosas de Caracas, y de su lucha contra el cáncer.
En un breve perfil de la nueva presidenta de la AN, destaca que Figuera es médico de profesión, dirigente política y diputada de la Asamblea Nacional en el exilio. Actualmente está residenciada en Valencia, España.
La diputada electa en 2015 ha representado a uno de los circuitos del estado Aragua desde el 5 de enero de 2016. En el período anterior, 2010-2015, fue diputada en la lista por Caracas. También es miembro de la Dirección Nacional del Partido Primero Justicia y en el pasado fue secretaría nacional de Justicia Familiar.
Figuera ha ejercido funciones en otros cargos públicos, como concejal metropolitana de Caracas de 2000 a 2004, concejal del Municipio Libertador de Caracas desde 1995 hasta el año 2000, subsecretaria municipal del Municipio Libertador de Caracas y dirigente social y comunitaria. Además, es miembro Honorario del Colegio de Enfermeras del Distrito Metropolitano.