Los colectivos se convirtieron nuevamente en blanco de señalamiento en el manejo irregular de los productos y distribución de las bolsas de los Comités Locales de Abastecimiento y Producción (CLAP), aseguraron fuentes del sector que solicitaron guardar sus nombres en reserva.
«A la habitual presencia de comerciantes informales de productos CLAP mediante el trueque o la compra en las adyacencias de edificios y casas se presentan personas integrantes y allegadas a los colectivos ofreciendo también comprar y canjear productos a los que le dan otro destino», sostuvo un consultado.
Los productos del combo de alimentos más involucrados en el cambio y compra son la harina precocida de maíz amarillo granos y -en menor medida- arroz y pastas alimenticias.
Las fuentes precisaron que ante la cada vez mayor pérdida del poder adquisitivo del ingreso familiar golpeado por la inflación en 2023 los beneficiarios de los CLAP así como de las bolsas de comida entregadas a los trabajadores activos y jubilados del sector público recurren al trueque de esos alimentos.
«Entre los comerciantes que habitualmente se ven en los alrededores de edificios y casas de Caracas, se han sumado otras carretillas y esa comida no va a los puestos de los buhoneros en la calle», reveló un consultado.
En las aceras de las avenidas de Caracas como Fuerzas Armadas hay numerosos puestos de buhoneros ofreciendo productos CLAP.
Varios de ellos señalaron el «secreto a voces» de que colectivos y otros afectos del PSUV se dedican al cambio y venta de los alimentos CLAP.
«Muchos de estos productos son llevados a centros de distribución y empaquetado de las bolsas CLAP, ubicados en varias zonas de la Gran Caracas», dijo un consultado.
Las fuentes sostuvieron que se desconoce si las autoridades están al tanto o no de este «reciclaje» en las bolsas de comida que los consejos comunales entregarán más adelante a los beneficiarios CLAP.
En los puestos informales de Caracas, los buhoneros dan medio cartón de huevos, una pila de plátano o una mano de cambur a cambio de dos paquetes de arroz y otros dos de harina de maíz.
Especulación y combos chucutos
Los beneficiarios de los CLAP no suelen cambiar los pocos alimentos con proteínas que contienen las bolsas, como son los dos paquetes de 250 gramos, cada uno, de leche en polvo -sola o mezclada con harina de arroz para preparar chicha- y las sardinas y mortadela de pollo enlatadas.
Otros renglones que se quedan en los hogares son el aceite vegetal, azúcar y parte del arroz y la pasta.
Las fuentes destacaron que vecinos de varias zonas populares de Caracas denunciaron que les venden el combo CLAP a 100 bolívares más diez bolívares de transporte.
Ese monto supera el «sugerido CLAP» de 35 bolívares por bolsa más 5 bolívares del transporte.
Otra queja de los usuarios es el tiempo de entrega de la bolsa. «En el interior del país la espera es de tres a seis meses. En Caracas, suele ser mensual, pero hay casos de entrega cada dos a tres meses», contó una fuente.
Los usuarios también cuestionan la calidad de los productos. «La harina de maíz hay que colarla para detectar si hay gorgojos y gusanitos mientras que los granos -hace años que solo entregan arvejas- vienen muy sucios y con piedras», sostuvo un consultado.