Las recientes declaraciones de Nicolás Maduro culpando a la oposición de los bajos salarios, especialmente en el sector público, fueron objetadas por sindicatos y trabajadores independientes y seguidores del oficialismo, aseguraron fuentes del mundo del trabajo.
Trabajadores que solicitaron guardar sus nombres en reserva consideraron lamentables los señalamientos del primer mandatario.
«No se qué piensa Maduro. La realidad es que los trabajadores somos cada vez más pobres», expresó un simpatizante del chavismo.
Otro trabajador de esa tendencia política contó: «No basta con buenas intenciones. El salario, las pensiones y los bonos no alcanzan para cubrir los gastos más esenciales».
Pedro Arturo Moreno, directivo de la Confederación de Trabajadores de Venezuela (CTV), calificó de cínicos y desproporcionados los señalamientos lanzados por Maduro la semana pasada en el marco de una reunión realizada en Miraflores con la directiva de la Asamblea Nacional electa en 2020.
«El oficialismo es totalmente el responsable del derrumbe del salario y otros beneficios como las prestaciones sociales y las vacaciones, además de las pésimas condiciones de los sistemas de salud y seguridad social», insistió el representante de la CTV.
Destacó que al imponer sus políticas económicas «el gobierno ni siquiera acata las disposiciones previstas en la Constitución y la Ley Orgánica del Trabajo (LOT) impulsadas por el mismo chavismo».
Derechos laborales en retroceso
Moreno rechazó el argumento de Maduro de que la Asamblea Nacional de 2015 no aprobó leyes para proteger el ingreso de los trabajadores y los derechos laborales, pues esa materia está claramente contenida en la Constitución y la LOT.
Estos dos instrumentos, señaló, garantizan la fijación de un salario mínimo que cubra el costo de la canasta básica, así como el principio de la progresividad e intangibilidad de los derechos laborales.
«Lo anterior significa que los derechos de los trabajadores siempre deben ser mejorados pero con el chavismo madurismo lo que se ha dado es un profundo retroceso», sostuvo.
Como ejemplo el dirigente cetevista recordó que el sueldo mínimo está congelado desde hace dos años en 130 bolívares mensuales equivalentes a 3,6 dólares.
«Venezuela tiene el salario mínimo más bajo del mundo. En Colombia el salario mínimo o de enganche está en 170 dólares al mes y lo devengan pocos trabajadores, pues la mayoría gana más de 410 dólares al mes», precisó.
El sindicalista insistió en que las políticas económicas del chavismo-madurismo han castigado a los trabajadores con el mayor impuesto: la inflación y la devaluación.
«De hecho, el salario mínimo perdió 90% de su poder adquisitivo en 2023», dijo Moreno.
Otras fuentes sindicales alertaron que por ser 2024 año electoral, el oficialismo hará promesas de mejoras laborales para captar los votos de los trabajadores.
«Esta estrategia también incluye descalificar y echarle la culpa a la oposición de la mala situación de los trabajadores», sostuvo un consultado.
Las fuentes revelaron que dentro de la estrategia electoral oficialista está la fijación de un nuevo salario mínimo en el marco de la Mesa de Diálogo Social entre representantes del gobierno, empleadores y trabajadores con el apoyo técnico de la Organización Internacional del Trabajo (OIT).
Maduro manifestó a principios de año en una entrevista con el periodista Ignacio Ramonet que se estaban buscando recursos para aumentar los sueldos y salarios.