El pasado domingo el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, atacó a través de su cuenta de Twitter a cuatro legisladoras del partido Demócrata, invitándolas a que regresarán a sus países en lugar de intentar decirle a la nación más poderoso del mundo como debía ser gobernado.
El grupo de cuatro legisladoras se conoce como el escuadrón por su fuerte activismo, desde su llega a Washington el pasado mes de noviembre ha sido muy polémico. Ellas son Alexandria Ocasio-Cortez, nacida en la ciudad de Nueva York y de origen puertorriqueño; la afroamericana Ayanna Pressley, originaria de Cincinatti; Rashida Tlaib natural de Ditroit con descendencia Palestina; e Ihlan Omar, que es naturalizada y originaria de Somalia.
«Qué interesante ver a las congresistas demócratas ‘progresistas’, que proceden de países cuyos gobiernos son una completa y total catástrofe, y los peores, los más corruptos e ineptos del mundo (ni siquiera funcionan), decir en voz alta y con desprecio al pueblo de Estados Unidos, la nación más grande y poderosa sobre la Tierra, cómo llevar el gobierno», publicó Trump en Twitter.
«¿Por qué no vuelven a sus países y ayudan a arreglar esos lugares, que están totalmente rotos e infectados de crímenes. Entonces que vuelvan aquí y nos digan cómo se hace», agregó.
En sus críticas el mandatario jamás mencionó los nombres de estas legisladoras. Sin embargo, la presidente de la Cámara de Representantes, la demócrata Nancy Pelosi, aseveró que no era necesario que lo hiciera, puesto que era bastante obvio a quienes se refería.
«Esos sitios las necesitan mucho, no se irán lo bastante rápido. ¡Estoy seguro de que Nancy Pelosi estará encantada de pagarles el viaje!, agregó en uno de sus tuits el presidente. A lo que Pelosi contestó: «Rechazo esos comentarios xenófobos de Trump que buscan dividir a nuestro país. En lugar de atacar a congresistas, debería trabajar con nosotros en una política migratoria humana, que refleje los valores estadounidenses».
Pelosi añadió que cuando Trump insiste en su consigna hacer américa grande de nuevo, en realidad se refería a hacer América un lugar para solamente blancos de nuevo.
Este último enfrentamiento hace recordar cuando Trump denunciaba que el expresidente Barak Obama no era realmente estadounidense, insistiendo en aquella época que el mandatario hiciera pública su partida de nacimiento.
Las congresistas atacadas también respondieron por sus redes sociales en contra de las declaraciones de Trump. Ocasio escribió por Twitter: «Señor presidente, el país del que vengo y por el que todas hemos jurado es Estados Unidos». Pressley respondió: «ESTE es el aspecto del racismo. NOSOTROS somos el aspecto de la democracia. Y no nos vamos a ninguna parte, excepto de vuelta a Washington DC a luchar por las familias que usted margina y vilipendia».