El prefecto de la Congregación para la Doctrina de la Fe, el cardenal argentino Víctor Manuel Fernández, emitió este jueves un comunicado para matizar algunos puntos de la declaración «Fiducia Supplicans» con la que, el pasado 18 de diciembre, quedaron permitidas las bendiciones a parejas homosexuales o en “situación irregular».
De esta forma, el Vaticano aclaró que lo que el controvertido documento permite son «bendiciones sin forma litúrgica que no aprueban ni justifican la situación en que se encuentran esas personas». Es por eso que las mismas no serán litúrgicas ni ritualizadas, sino «espontáneas o pastorales».
«La Declaración contiene la propuesta de breves y simples bendiciones pastorales (no litúrgicas ni ritualizadas) a parejas (no a las uniones) irregulares», precisó el ex Santo Oficio ante las dudas expresadas por numerosos obispos y miembros del clero.
«La verdadera novedad del documento» reside en «la invitación a distinguir» entre bendiciones «litúrgicas o ritualizadas» y «espontáneas o pastorales», las que se podrán impartir a este tipo de relaciones, reza el comunicado reseñado por la agencia EFE.
Estas “bendiciones pastorales, para que se distingan de las litúrgicas o ritualizadas, ante todo deben ser muy breves”. “Son 10 o 15 segundos. ¿Tiene sentido negar este tipo de bendiciones a dos personas que la suplican?”, cuestiona.
El Vaticano de Francisco, aunque permita estas bendiciones «espontáneas» o informales a parejas homosexuales, no las homologa al matrimonio canónico.