El féretro de la actriz italiana Gina Lollobrigida fue acogido este jueves con aplausos por sus admiradores en la Plaza del Pueblo de Roma, antes de su funeral con familiares, amigos y su exmarido, el empresario español Javier Rigau, entre otros.
El funeral concluye dos días de capilla ardiente instalada en el Palacio del Campidoglio, sede del ayuntamiento de Roma, por donde han desfilado sus admiradores y autoridades como la primera ministra, Giorgia Meloni, o el alcalde, Roberto Gualtieri.
Las exequias tuvieron lugar este jueves dentro de la conocida como Iglesia de los Artistas ante sus familiares y personas más próximas, mientras que muchos de sus admiradores esperaron a las puertas del templo, en la céntrica Plaza del Pueblo de la capital italiana.
En el último adiós a la diva, fallecida el pasado lunes con 95 años, estuvieron presentes su único hijo, Milko Skofic, fruto de su matrimonio con el médico esloveno Milko Skofic, y su nieto, Dimitri. También acudió el empresario español Javier Rigau, quien mantuvo una mediática relación con la actriz, 34 años mayor, y un matrimonio desde 2010 “por poderes”, lo que derivó en una batalla legal entre ambos y el logro de Lollobrigida de la nulidad del Vaticano.
Rigau y su familia en los últimos años obligaron a la justicia italiana a poner un tutor a la actriz para que custodiara su patrimonio ya que temían que estaba siendo “expoliada” por su joven asistente, Andrea Piazzola, de 35 años e imputado por este caso.
Rigau, abucheado en la calle por algunos admiradores de la actriz, no quiso hacer declaraciones por estar “de luto” y avanzó que dará una rueda de prensa en los próximos días.
Tras el funeral, el féretro de la “Lollo” fue sacado del templo mientras sonaban las trompetas de un grupo de “bersaglieri”, el cuerpo de infantería al que hizo famoso por su papel en la película “Pane, amore e fantasia” (1953) junto a Vittorio De Sica.
Además de decenas de admiradores, también acudieron al funeral algunos de los amigos de la diva, como la presentadora Mara Venier y el director y productor Giulio Base, que leyó la Oración de los Artistas.
Los medios italianos especulan ya sobre el reparto del patrimonio de la actriz, que residía en una villa en la exclusiva Appia Antica de la capital italiana. El portal “Fanpage” ha calculado que Lollobrigida deja una herencia de alrededor de 10 millones de euros entre bienes inmuebles y otros objetos como cuadros o joyas y asegura que su testamento está en manos de un notario.
Fuente: El Nuevo Herald