El pasado sábado el Ejecutivo nacional informó que, a partir de este 1 de junio de 2020, se iniciaría la primera fase de flexibilización de la cuarentena en el país, que fue activada el 13 de marzo debido a la presencia de casos positivos de COVID-19 en el territorio nacional.
La vicepresidenta de Nicolás Maduro, Delcy Rodríguez, explicó que serían nueve los sectores que podían reiniciar sus actividades en horarios comprendidos entre las 6 de la mañana y hasta las 5 de la tarde. Las agencias bancarias, los talleres mecánicos, las peluquerías, los consultorios médico-odontológicos, el sector construcción, las ferreterías, la industria textil y del calzado, las ventas de repuestos y autopartes, los servicios de refrigeración y plomería y finalmente el transporte público, son los que contaron con el aval del gobierno.
El presidente de la Confederación Venezolana de Industriales (Conindustria), Adán Celis, aseguró que es necesario que se amplíe el abanico de sectores que puedan iniciar la reactivación de actividades, porque de lo contrario un importante número de empresas se verán en la obligación de cerrar sus puertas.
La cuarentena decretada por el coronavirus ha empeorado la crítica situación del sector industrial venezolano. Veníamos trabajando entre 20% y 25% de productividad, lo que significa una recesión muy importante. Luchábamos con una crisis económica muy fuerte antes de entrar con todo este tema del coronavirus. Luego de la cuarentena la situación es mucho más difícil tanto para la economía, como para el sector industrial. Es por ello, que exhortamos a los señores del gobierno a que amplíen de manera inmediata la lista de los sectores que pueden reiniciar sus actividades. Por supuesto, con todos las medidas de seguridad sanitaria necesarias para evitar la propagación del COVID-19, sentenció.
Advirtió que de mantenerse esta primera fase del 5 + 10 por mucho tiempo, cerca de 800 industrias en el país podrían verse afectadas y no tendrían la oportunidad de abrir sus puertas, porque sencillamente ya se les acabó el flujo de caja y no tienen como pagar las nóminas y los compromisos con sus empleados. Si no se inicia una reactivación inmediata de las empresas y las industrias, son muchos los venezolanos que se podrían quedar sin trabajo, apuntó.
Precisó que Conindustria ha diseñado un plan de reactivación industrial con todas las garantías sanitarias sugeridas por la Organización Mundial de la Salud, por lo tanto, exhortó al Ejecutivo a que tome en cuenta esta información y permita la reapertura de todos aquellos sectores que quedaron excluidos en esta primera fase de flexibilización de la cuarentena.
El llamado es a que nos escuchen
Por otra parte, el coordinador general de la Asociación de Trabajadores, Emprendedores y Microempresarios (Atraem), Alfredo Padilla, coincidió en la solicitud de que se flexibilice aún más los horarios y días de trabajo, con el fin que los pequeños y medianos comerciantes puedan ir recuperando sus negocios.
Los trabajadores por cuenta propia, los emprendedores y los microempresarios representan 60% de la población económicamente activa en el país. Lamentablemente vemos como el gobierno se reúne con empresarios, con los gremios empresariales, pero deja por fuera a la gran mayoría de los trabajadores del país, para discutir estos temas de flexibilización y reactivación de la economía luego del periodo de cuarentena que fue aplicado por la pandemia del coronavirus COVID-19, lamentó.
Precisó que según los informes de la Organización Internacional del Trabajo (OIT) Venezuela tiene más de 8 millones de trabajadores por cuenta propia, que por lo general no están amparados por la administración de Nicolás Maduro, por lo que es necesario que se les permita trabajar porque la gran mayoría vive del día a día.
Los trabajadores por cuenta propia, emprendedores y microempresarios las están pasando muy mal con este tema de la cuarentena, porque no tienen ningún tipo de subsidio por parte del Estado. En algunos casos solo cuentan con un bono de 300 mil bolívares que les dieron vía carnet de la Patria, pero eso ni siquiera alcanza para comprar varios alimentos. Si uno vive del día a día y no nos permiten trabajar, sin duda alguna somos una población mucho más vulnerable, comentó.
Dijo que desde Atraem han solicitado una reunión urgente con la vicepresidencia de la República para poder conversar y así llegar a acuerdos que ayuden a todos los sectores del país, es decir, a las grandes empresas, a las industrias, pero también a los trabajadores por cuenta propia y microempresarios.
Hacemos un llamado para que haya más flexibilización, para que también exista algún tipo de apoyo económico para nuestros afiliados y nosotros como Atraem pedimos la cantidad de 100 dólares mensuales, que sean además cancelados con retroactivo antes que se termine la cuarentena para así darle un impulso a todos aquellos trabajadores por cuenta propia que gastaron su capital para poder sobrevivir en estos meses, dijo.
Padilla señaló que es necesario la unión de todos los sectores productivos del país para que de una vez por todas el Ejecutivo nacional los tome en cuenta y así deje de estar tomando decisiones por cuenta propia, que ponen aún más contra la pared a todos los trabajadores, microempresarios y empresarios del país.
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