Aquella noción de que el empleado debe estar totalmente “pegado” al trabajo ha ido perdiendo terreno. Ahora, el bienestar de los trabajadores se ha convertido en uno de los elementos clave para la fidelización del talento humano. Así que muchas empresas no han perdido el tiempo y han decidido enfocarse también en la satisfacción de sus empleados.
Y, sin duda, esta estrategia genera ventajas para todos: motivar al personal implica potenciar la productividad en el trabajo y, por ende, alcanzar el desarrollo continuo de las compañías. Esto se logra mediante un aumento en el grado de satisfacción y compromiso de los trabajadores y aplicando medidas para prevenir el ausentismo laboral.
Es por ello que hoy en día se habla de desarrollar empresas más humanas, que no solo tengan en cuenta la rentabilidad y la eficiencia, sino que también cuiden, formen, incentiven y potencien a su capital humano, que es uno de sus principales activos.
El objetivo es que los empleados se sientan satisfechos en sus puestos de trabajo y estén dispuestos a dar lo máximo en aras de su profesión y también de la compañía. Y es que las personas más motivadas son las más productivas, mientras que las que están sometidas a altos niveles de estrés y presión, o que no ven posibilidades de crecimiento laboral no dudan en dejar la organización.
Así que para evitar precisamente la fuga de talento vale la pena hacer a las empresas más humanas. Convertirlas en lugares deseables para trabajar, que atraigan el talento por las posibilidades de crecimiento que ofrecen a los profesionales. Es lograr que los mejores candidatos deciden quedarse para desarrollar su carrera laboral allí.
Una vía, aunque suene paradójico, es a través del entretenimiento bien dirigido -entiéndase, creando condiciones laborales placenteras y hasta divertidas según sea el caso- aporta a los empleados sentido de pertenencia y una mayor disposición al trabajo en equipo. Cuando el trabajo se realiza por diversión o porque le gusta al empleado se logra que este sea más colaborador, creativo e innovador.
Es un error ver el trabajo como una pesada carga, pues esto conduce al aburrimiento y tedio, lo cual redunda en un desempeño mediocre y hasta triste. En cambio, cuando el empleo asume con satisfacción sus funciones y responsabilidades emergen a la superficie las habilidades y talentos individuales.
Visto lo anterior, es bueno reiterar que un recurso humano altamente motivado y creativo puede generar mejores resultados para la compañía y, además, se la pensarán dos veces antes de irse. ¿La razón? Los empleados sienten satisfechos.