La industria de bebidas alcohólicas en Venezuela se encuentra sumamente afectada y preocupada por el incremento del comercio ilícito de bebidas, además de una importante desproporción tributaria, lo que ha impactado de manera directa en el posible crecimiento del sector.
En este sentido, Luis Enrique Cárdenas, presidente de la Cámara de la Industria de Especies Alcohólicas (CIVEA), explicó que en los últimos siete años en el país se ha incrementado el comercio ilícito de bebidas, lo que también se ha convertido en una seria amenaza para la salud de los venezolanos.
“Nosotros como sociedad, incluyendo al gobierno, que es el actor principal porque ejecuta las políticas públicas, e incluso el sector privado, tanto los industriales como los comercios que trabajamos con bebidas alcohólicas, no hemos hecho lo suficiente para detener este comercio ilegal de bebidas”, aseguró Cárdenas.
Indicó que en el caso específico del gobierno “podemos decir de manera responsable que sí ha habido medidas por parte del Seniat, la Guardia Nacional, la Contraloría Sanitaria, incluso Sencamer, la Fiscalía. Han realizado operativos e investigaciones, pero ninguna ha sido de manera integral y consistente y, definitivamente, no han tenido un impacto porque el comercio ilícito sigue subiendo”, aseguró.
Al ser consultado sobre las medidas que se necesitan aplicar para controlar la venta y expendio de bebidas alcohólicas, afirmó que se debe reconocer que existe un problema a nivel nacional. Por lo tanto, las soluciones deben venir de varios sectores.
“Debemos reconocer como sociedad que tenemos un problema que está colocando en riesgo la vida, la salud, los empleos formales, la inversión, la producción y las exportaciones. Ese es el primer paso. Nosotros desde el 2017 hasta la fecha hemos llevado el registro de fatalidades que se publican en los medios de comunicación y en este período han fallecido 63 personas, principalmente que vivían en comunidades populares, que murieron por uno de los ilícitos que son las bebidas clandestinas adulteradas”, dijo.
Añadió que en el país “también existe el comercio de licores sin los permisos correspondientes, sin ninguna regla moral, sin ninguna regla sanitaria, sin ninguna restricción en las redes sociales. Debemos concientizar a la población, porque una de las causas principales del ilícito es que nosotros como sociedad lo aceptamos”.
“Vemos un producto ilícito y lo compramos sin revisarlo, sin preguntar de dónde viene esa bebida. Nosotros vemos un producto importado en los comercios de una marca reconocida y no nos interesa si lo está vendiendo legalmente, si nos facturan o no nos facturan y allí es donde debe existir la conciencia ciudadana”. advirtió.
Cárdenas indicó que también se deben revisar las regulaciones que existen en el país, sobre todo en materia de tributos, porque los cobros son realmente excesivos.
“Debemos revisar la manera cómo se están cobrando estos tributos porque no es la manera correcta: está socavando al sector privado. Nos está quitando recursos para invertir y no le está generando al gobierno ningún tipo de recaudación. Por otra parte, es necesario que las autoridades salgan a fiscalizar porque si los escenarios son tan evidentes, tienen que existir medidas ejemplarizantes que envíen un mensaje muy claro a todos las personas que comercializan de manera ilícita las bebidas alcohólicas”, precisó.
Todos debemos respetar las leyes
Cárdenas aseveró que todos los que hacen vida en el sector licorero deben cumplir con las reglas y, por tal motivo, hizo un llamado a los emprendedores para que se ajusten a la normativa legal vigente.
“Hay una tendencia muy interesante que estamos viendo en el país y son los emprendedores. Nosotros les damos la bienvenida porque estamos conscientes que ellos no van a tener al inicio la misma dimensión de la empresa formal grande, de la empresa exportadora, eso lo tenemos claro”, señaló.
Añadió que estos emprendedores son bienvenidos porque “están generando inversiones, están generando puestos de trabajo. Pero qué significa bienvenidos, que deben cumplir con las normas, que deben pagar impuestos, que deben sacar las patentes en las alcaldías, que deben vender los productos con los mismos estándares de calidad, porque no se pueden vender bebidas con tapas defectuosas o etiquetas de mala calidad”.
No obstante, advirtió que si hay alguna autoridad que cree que “todos estos pasos son muy engorrosos para los emprendedores, entonces optimicemos las políticas públicas para agilizar todos estos trámites y así formalizamos al emprendedor para que trabaje ajustado a la ley”.
Las expectativas son buenas para final de año
El representante del gremio licorero aseguró que las expectativas para finalizar el año son positivas y esperan que el comercio ilícito no cambie el escenario.
“En los meses de noviembre y diciembre se vende el 30% de lo que se vende en el año, el otro 70% se vende entre enero y octubre. En diciembre habrá un crecimiento porque se multiplica la venta por cuatro o por cinco. Vamos a crecer con respecto al año pasado porque 2019 fue muy negativo para el sector. Duramos 7 meses sin poder operar y caímos 35%. Sin embargo, si hablamos de proyecciones futuras, a nosotros nos va a costar mucho recuperar el nivel de consumo que teníamos en 2014, que era alrededor de 6 litros por persona al año. En la actualidad, legalmente estamos a menos de un litro y medio”, precisó.
Recordó que desde el año 2015 el sector industrial licorero venezolano no había experimentado crecimiento, debido en gran parte al comercio ilícito y es en 2021 que hay cifras positivas, aunque no se puede olvidar el escenario generado por la pandemia.
“En el mundo se estima que el nivel de consumo de bebidas alcohólicas prepandemia se recuperará en 2024. Así que esperamos montarnos en esa ola, siempre y cuando se tomen los correctivos necesarios en Venezuela”, concluyó el presidente de Civea.