Luego de que Instagram censurara un carrusel con 10 fotografías de Madonna, la cantante volvió a subir las mismas, pero editando la de la controversia.
En una de las gráficas, la intérprete mostraba uno de sus pezones. Así que para el segundo intento lo tapó con un corazón. No obstante, aprovechó el momento para descargarse las políticas de la red, sobre todo porque la publicación original, cuando se la eliminaron, tenía casi un millón de likes.
«Estoy volviendo a publicar las fotografías que Instagram derribó sin previo aviso o notificación. La razón por que le dieron a mis representantes, que no manejan mi cuenta, fue que una pequeña porción de mi pezón estaba expuesta. Todavía me sorprende que vivamos en una cultura que permite que se muestre cada centímetro del cuerpo de una mujer excepto un pezón. Como si esa fuera la única parte de la anatomía de una mujer que podría sexualizarse. ¡El pezón que nutre al bebé!”, escribió.