El restablecimiento de las relaciones diplomáticas entre Colombia y Venezuela está próximo a cumplir dos años y desde el punto de intercambio comercial –pese a los obstáculos económicos y políticos- ha ido avanzando gracias a la implementación del Acuerdo de Alcance Parcial que ambos países firmaron en 2011, tras la decisión del presidente Hugo Chávez de ordenar el retiro de la Comunidad Andina de Naciones (CAN), señala el semanario Exclusivas Económicas.
Los equipos negociadores ahora gozan de la decisión política de alcanzar un acuerdo de complementación económica, lo que implicaría que ya no sólo sería un tratado arancelario, como existe actualmente, sino de la conformación de un libre mercado de bienes con la posibilidad de extenderlo a servicios como el que existió en el marco de la CAN, agrega la publicación.
El gobierno de Nicolás Maduro se ha mostrado reacio de aceptar la propuesta de Gustavo Petro de que Venezuela regrese a la Comunidad Andina. En primer lugar, por razones comerciales, tomando en cuenta la membrecía en Mercosur y, segundo, porque se sumaría al listado de hechos que evidencian el avance del oficialismo en desmontar el legado del fallecido mandatario, advierte Exclusivas Económicas.
Otro obstáculo que afrontaría la conformación de ese libre mercado de bienes colombo-venezolanos es la resistencia del Congreso de Colombia de aprobar un tratado de inversiones; sobre todo, para resguardar los capitales de inversión o comerciales y otorgar seguridad jurídica frente a un país como Venezuela, que en los últimos 25 años se ha ganado la reputación de ahuyentar la inversión con las expropiaciones sin indemnización o confiscaciones que marcaron la gestión de Chávez en su segundo mandato entre 2007 y 2013.