En el marco del 40º aniversario de la Confederación de Salud Mental de España, la reina Letizia presidió el acto de inauguración del XXII Congreso de esta institución, que se ha centrado en la historia del movimiento asociativo y su contribución al progreso de la salud.
Durante su mensaje, la Reina dijo que hablar ahora, en la conversación pública en España, de salud mental es algo «menos raro y menos incómodo» que hace 40 años; y añadió que «todos en algún momento necesitamos parar, admitir, ser conscientes de nuestras vulnerabilidades, de nuestras debilidades, poder expresar un ‘no puedo’, ‘no sé’, ‘no siento’, necesito tiempo’, ‘necesito parar».
De todos los estudios que se expondrán durante el congreso, la reina destacó el realizado por la Confederación junto con la Fundación Mutua Madrileña.
De esta investigación resaltó dos datos: el primero, que 40% de los españoles considera que su salud mental no es buena. Y el segundo, que otorgan un 4,5 sobre 5 a la importancia en salud mental dentro de su bienestar general.
Recomendó «la lectura detallada y minuciosa de ese estudio», porque, según dijo, éste arroja datos reveladores y dice cosas que parecen obvias, pero que merecen ser recordadas.
Letizia dijo que la salud mental debe ir más allá de lo sanitario, y que se trata de incorporar una mirada que contemple e integre lo social, las oportunidades y condiciones de trabajo dignas, la educación, que evite los estigmas, que preserve la información desde los medios de comunicación, y recuerde la protección también de las cuidadoras y los cuidadores.
«Hablar de salud mental no puede ser una moda, no debe serlo», dijo Letizia; sin olvidar las cifras «tozudas» de esta realidad en España: «Por cada 100.000 habitantes, hay 6 psicólogos clínicos, 3 veces menos que la media europea y 11 psiquiatras, 5 veces menos que en Suiza y menos de la mitad que en Francia, que en Alemania y que en Países Bajos».
La reina insistió en la necesidad de una educación temprana en salud, que significaría la prevención.
A su juicio, esto dotaría a la población de herramientas para poder gestionar las emociones, así como para afrontar la adversidad y las situaciones traumáticas que todos tenemos en la vida.
«No es la primera vez que escuchamos a la comunidad científica y a la comunidad educativa pedir que se incluya la formación en salud en las etapas básicas de la educación. Infantil, primaria, secundaria, bachillerato, formación profesional, formación en salud. Y cuando digo salud me refiero a algo integral. Se podría llamar la asignatura, por ejemplo, educación integral para la salud…
Hace muchos años que la OMS viene recomendando que se incluya en los currículums escolares la educación para la salud. Pero ellos lo llaman ‘health literacy’, que contiene no solo la gestión emocional, sino también cómo podemos entender esos pensamientos tóxicos que todos tenemos, cómo los podemos gestionar. Y luego lo que significa la elección que hacemos cada día sobre lo que comemos, lo que bebemos, cómo pensamos, los tóxicos que evitamos, el alcohol, el tabaco, productos ultraprocesados, cómo descansamos, el ejercicio que hacemos o que dejamos de hacer. Y cuando hablo también de conocimiento de la salud, es lo que recomienda la Organización Mundial de la Salud, tiene que ver con cuestiones, por ejemplo, diréis, esto es muy elevado, el metabolismo y la glucosa, la resistencia a la insulina. ¿Qué tiene que ver eso con la salud mental? Tiene que ver con sus componentes. Ahí dejo la idea», agregó.
Antes de concluir su discurso, Letizia dijo que había que seguir haciendo mucho trabajo ahora que se empieza a hablar de salud mental, y de la falta de ella.
«Hay que seguir impulsando esa coordinación entre los ámbitos sanitario, social, educativo. Eso es lo que vosotros estáis haciendo durante 40 años. Por eso os admiramos, os respetamos y os agradecemos», finalizó.
Fuente: Vanitatis