El líder de Corea del Norte, Kim Jong Un, llegó este martes a Rusia para reunirse con el presidente Vladimir Putin, un encuentro en el que se espera que se ofrezcan un mayor apoyo mutuo en sus crecientes enfrentamientos con Occidente.
Se espera que Kim busque ayuda económica y tecnología militar rusa a cambio de municiones que se utilizarían en la guerra de Rusia en Ucrania.
La agencia de noticias oficialista norcoreana KCNA reportó que Kim subió a su tren blindado en la capital, Pyongyang, el domingo por la tarde acompañado de miembros del partido gobernante, funcionarios gubernamentales y militares.
Tras décadas de relaciones complicadas con altibajos, Rusia y Corea del Norte se han acercado desde que las tropas del Kremlin invadieron Ucrania en 2022.
El vínculo se ha visto impulsado por la necesidad de Putin de obtener suministros bélicos y los esfuerzos de Kim para impulsar sus alianzas con aliados tradicionales, Moscú y Pekín, mientras trata de romper el aislamiento diplomático.
El Norte podría tener decenas de millones de proyectiles de artillería y cohetes producidos a partir de diseños soviéticos que podrían suponer un gran impulso para la campaña rusa en Ucrania, según los analistas.
Kim Jong Un podría buscar también los suministros de energía y alimentos que tanto necesita, según los analistas. De acuerdo con las agencias noticiosas rusas, el viceministro de Exteriores, Andrei Rudenko, indicó que el Kremlin podría hablar también de ayuda humanitaria con la delegación norcoreana.
Kim y Putin podrían reunirse en Vladivostok, una ciudad del este de Rusia a donde Putin llegó el lunes para asistir a un foro internacional que termina el miércoles, reportó la agencia noticiosa rusa TASS.
La primera reunión entre los dos mandatarios se celebró en 2019 en esa misma ciudad, a unos 680 kilómetros al norte de Pyongyang.
Con información de VOA