Nazareno de San Pablo: la fe venció al temor de contagio por COVID-19

Este miércoles 31 de marzo, el venerado Nazareno de San Pablo recorrió, por segunda vez en su historia, las calles de Caracas y parte del estado Miranda a bordo del Papamóvil, dadas las medidas de bioseguridad para evitar los contagios por COVID-19.

El llamado “Limonero del señor”cubrió ocho tramos de la capital. La primera zona pastoral del recorrido abarcó la salida de la imagen desde la Basílica de Santa Teresa hasta la Zona F del 23 de Enero. En este primer trecho abundaron los fieles que buscaron acercarse al Jesucristo con la cruz a cuestas, evadiendo las medidas de bioseguridad y distanciamiento entre las personas.

Durante su paso por el Hospital General José Gregorio Hernández, de Los Magallanes de Catia, el Nazareno fue recibido por el personal de salud y pacientes, además de la feligresía que esperó su llegada en las puertas de sus hogares, quienes pedían con fe a la imagen la sanación de los pacientes de COVID-19. “Todos los días le pido a Dios que elimine esta pandemia de mi país”, decía una trabajadora del centro de salud.

Esta parada ocurrió a las 12 del mediodía, hora en la que se le había solicitado a los fieles, a través de las redes sociales, hacer un acto de penitencia y que se arrodillarán para orar por la sanación de los enfermos y la erradicación de la pandemia. “Yo sí me arrodillo por Venezuela”, se leía en el flyer de invitación y en un par de etiquetas que rodaron por Twitter con imágenes de personas arrodilladas en las salas de sus casas o en las calles.  

Recorrido de fe

Entre aplausos y lágrimas fue recibido el Nazareno en cada uno de los tramos que recorrió. La segunda zona pastoral abarcó desde la bajada del Hospital Militar hasta la plaza Madariaga de El Paraíso. Luego el Papamóvil transitó desde la avenida Nueva Granada hasta la autopista Valle–Coche, donde también fue recibido por un gran número de personas que esperaba en las calles.

Estas aglomeraciones de fieles llamaron la atención y preocupación de las personas que, a través de las redes sociales, recordaron que la importancia de entender que el país se encuentra en una de las fases más fuertes de la pandemia.

El cardenal Baltazar Porras tomó la palabra para pedirle al pueblo venezolano a que se uniera en oración al Nazareno de San Pablo en su recorrido por las calles de la capital de Venezuela. “Hoy imploramos a Dios por el fin de la pandemia en el mundo», dijo

Pasadas las seis de la tarde, la imagen del Nazareno de San Pablo continuó su recorrido por el municipio Baruta, aún le faltaba transitar por las zonas pastorales noreste, que incluye parte del municipio Sucre y del municipio Chacao, para luego emprender su retorno hacia el sur de la ciudad, que tenía como parada final la Plaza Miranda del centro de Caracas antes de ingresar de nuevo a la Basílica de Santa Teresa.

En Los Teques acompañaron el recorrido

Los habitantes de Los Teques también acompañaron el recorrido del Nazareno de la parroquia El Barbecho. La imagen que previamente había visitado, junto a la imagen de la Dolorosa, las cercanías del Hospital Victorino Santaella, hoy pudo ser saludada por todos los vecinos en su recorrido por las calles de la ciudad.

Gilber Rangel, becario parroquial de la Catedral de Los Teques, recordó que “Jesucristo es la fuente de nuestra esperanza y creo que por esta razón en nuestro país las personas le tenemos muchísima devoción al Nazareno. Es Jesucristo quien carga con la cruz, quien se pone en nuestro lugar”.

El religioso aseguró que este miércoles todos los venezolanos rogaban a Jesucristo por dos razones especiales. “Creo que en el corazón de los venezolanos late una petición doble: que Venezuela sea reconstruida y que termine la pandemia en el mundo entero”.

Gabriela Fermín quien paga promesa junto a su pequeña hija en petición por la salud de ambas, pidió que acabara la pandemia. “Primeramente que toda mi familia esté sana. En segundo lugar, que la pandemia que hay en nuestro país se elimine, porque ya es como mucho. Ya tenemos mucho tiempo padeciendo esto y necesitamos tener paz en nuestro país, sanidad. Y de verdad le he pedido mucho porque veo que cada vez las cosas se tornan un poco más difícil y yo no quiero eso”.

Por su parte, Yelitza Rodríguez, otra fiel que esperaba en las calles de Los Teques e al Nazareno, aseguró: “Cuando uno ama al Señor y tiene una fe tan fuerte como la que tiene el pueblo venezolano, con el Nazareno bendito estas limitaciones por la situación que el mundo nos impone nos hace crecer más en la fe y llevamos la Iglesia como templo en cada uno de nuestros corazones”.

A su juicio, la razón de que la Semana Santa sea celebrada por segunda vez a puertas cerradas y sin procesiones es solo una demostración de fe. “Que acreciente nuestra fe, porque son tiempos muy difíciles. La familia hay que fortalecerla en la fe, en los valores y solamente él es quien nos levanta y nos restaura. Estoy segura que estas pruebas que estamos pasando, el Señor tiene cosas buenas para la humanidad”, dijo.